Siempre me han llamado la atención los comportamientos humanos. Concretamente, en este momento viene a mi mente aquel suceso en que un niño, con un machete y una ballesta, asesinó a un profesor y mató a otras cuatro personas. La pregunta que me hago. y quizás ustedes también, es ¿qué es lo que está pasando para que un chiquillo pueda cometer semejante atrocidad?, ¿qué valores enseñamos a nuestros pequeños?, ¿son los padres y madres conscientes de cómo están educando a sus hijos?, ¿se preocupan lo suficiente de cómo se sienten, qué hacen, cuáles son sus amigos?
Lo cierto es que hoy disponemos de mucha información, gracias a los grandes avances en neurobiología. Y sabemos que la relación de padres con hijos tiene poder para condicionar su desarrollo cerebral. Debemos tener muy presente que, tanto los fetos como los bebés, perciben constantemente los actos, pensamientos y sentimientos de su madre. Y claro está, los papás son tan responsables como las mamás de la concepción y del embarazo, aun cuando sea la mujer la que lleva al pequeño en su vientre. Lo que hace el padre afecta profundamente a la madre, lo que a su vez influye en el desarrollo del hijo. Por eso, no debemos olvidar que desde el momento de la concepción, las condiciones del útero moldean el cerebro y establecen las bases de la personalidad, el temperamento emocional y la capacidad de pensamiento lógico del niño.
Por eso, señoras y señores, ahí radica la gran responsabilidad de papás y mamás. Sin embargo, en líneas generales, estamos poniendo estas cargas a los profesores y psicólogos, que no les corresponden. Queremos aumentar el control policial en escuelas, pero ¿va a servir de algo si estos pequeños carecen de cimientos sólidos? Porque, lo importante son los valores y las creencias, que son los que, en definitiva, van a influir en los comportamientos y actitudes en la vida de nuestros pequeños. Y éstos comienzan a adquirirse desde el momento de la concepción.
Sin duda, ser padres y madres es una vivencia muy significativa en nuestra vida. Pero para ello, hay que prepararse muy, muy a fondo y asumir su gran responsabilidad.
