La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

LNE FRANCISO GARCIA

Billete de vuelta

Francisco García

Sacrificio y solidaridad

En un bloque de piedra, Miguel Ángel veía la posibilidad de una estatua. En un grupo humano que acaba de conocerse y empieza a reconocerse, Abelardo, entrenador del Sporting, ve un equipo rocoso con posibilidades de transitar por la máxima categoría sin apuros ni estrecheces. Tremenda osadía parece lanzar las campanas de San Pedro al vuelo pasadas solamente tres jornadas, por mucho que el cuadro rojiblanco se haya encaramado a la zona noble de la tabla, en los puestos que dan acceso a la Liga de Campeones. Sólo el todopoderoso Madrid florentino ha conseguido mejor cosecha que los locales, que aún no conocen la derrota, a la misma altura que el Sevilla. Se trata, obviamente, de una mera anécdota, pero no conviene perder de vista que siete puntos de nueve es una consecución casi impensable para una escuadra en formación, cargada de nuevas adquisiciones, pendiente de conjuntarse.

Pero ahí están los chavales de Abelardo, terceros por arriba, alejados de la cola del pelotón, ilusionando una vez más a un estadio lleno, a una ciudad entera. El éxito es coral: se ha fichado bien. Se ha reforzado la marca pero el éxito, por momentáneo que sea, tiene nombre y apellidos. Que cada cual los señale, tengan asiento en los despachos o cabalguen sobre el césped. Con mejores mimbres que el pasado curso, pero la filosofía es la misma: sacrificio y solidaridad. Y esa intención programática de éxito también es claramente reconocible, dando órdenes al pie del banquillo.

Compartir el artículo

stats