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Nueces de California

Burbujas y cópulas

La actividad que genera el hormigón

Errar es de humanos.

Perdonar es de perros.

Repetir errores, de idiotas.

Decía el General De Gaulle que cuando la construcción funciona, todo funciona, porque genera una actividad industrial que hace que aumente el empleo, que se mueva el dinero y se vendan más pisos, más coches, y se consuma más petróleo, y más energía, y se alimente a esta gran pescadilla que se muerde la cola, en un círculo vicioso que hace la alegría de los políticos, de las empresas constructoras, de los bancos, de las petroleras, de las energéticas, de las mineras, de las telecomunicaciones y de la iglesia, que ve cómo aumenta el cepillo... Están todos asociados, correlacionados, atados por un mismo cordón umbilical. Que una mezcla tan sencilla como el hormigón, que es básicamente agua, cemento y áridos, genere tanta actividad puede parecer increíble, pero no lo es, algo tiene que ser la semilla, y la vivienda es una de las necesidades esenciales del ser humano, y no hay que ser doctor honoris causa para hacer una casa, pero sí para controlar el mercado.

Aznar lo sabía e hizo todo lo posible para impulsar a fondo esta actividad, modificando la Ley del Suelo, instaurando en los ayuntamientos unos reinos de taifas autárquicos, generando una burbuja inmobiliaria y una actividad ingente ligada a la modernización de la red de carreteras y del tranvía, dado que España tenía un retraso histórico. Me acuerdo de que cuando llegué a París en 1986 para estudiar en el Instituto Francés del Petróleo, mis compañeros franceses me tomaban el pelo por la lentitud de los trenes de la Renfe, mientras que en Francia, la SNCF tenía una red de ferrocarriles muy eficiente y ya habían inaugurado la primera línea de TGV París-Lyon en 1981. Yo no era consciente de la diferencia abismal. Los gobiernos del PSOE de Felipe González ya habían iniciado esta modernización.

Cuando en 1999 empecé a construir la casa donde vivo, los planes de urbanismo del Ayuntamiento de Oviedo cambiaban casi en tiempo real. En zona rural comprabas una finca edificable y al poco tiempo podía perder su estatus. Se decía que se intentaban proteger las zonas rurales para evitar una construcción masiva de viviendas unifamiliares, pero lo que realmente ocurría es que los planes de urbanismo se hacían para favorecer los intereses urbanos de diversas empresas constructoras.

La vivienda nunca fue realmente un mercado liberalizado, sino que estaba, y está, controlado por intereses particulares. ¿Por qué es necesario realizar un proyecto de arquitecto y de aparejador para hacer una vivienda unifamiliar, que encarece notablemente su presupuesto? ¿Por qué se exigen licencias tan onerosas? ¿Por qué no es posible hacer tu casa en terrenos de tu propiedad si se verifican unas mínimas normas de urbanismo que deberían ser comunes a todas las construcciones? Porque no interesa. En muchos casos, las condiciones de las licencias son tan difíciles de cumplir que muchas personas optan por hacer la obra sin pedir licencia. Paradójicamente, estas personas que incumplen la ley y que realizan verdaderas chapuzas no suelen tener ningún problema. Los problemas los tienen los idiotas que, como yo, incluso piden permiso para cambiar una teja. Esta no debería ser la forma de funcionar en un ayuntamiento.

El éxito del plan Aznar fue tan grande que llegó un momento en que no había ladrillos en el mercado, estaba todo vendido. Era constructor cualquier gañán iletrado que supiese coger una paleta. Vi a muchos obreros pasar en la construcción de mi casa. La mayoría eran analfabetos y por poner yeso, azulejos o ladrillos ganaban cinco veces mi sueldo como profesor de universidad. Eran los años de apogeo, del "España va bien", entraba dinero a mansalva en los ayuntamientos provenientes de licencias urbanísticas, y los sobres, los restaurantes-clase y las casas de citas resplandecían por doquier. Era la gran orgía del cemento, del ladrillo y del hormigón. No había político que no cortase cientos de cintas y prometiese a sus conciudadanos, inauguración tras inauguración, nuevas obras y fabadas a gogo.

Los bancos acompañaban y daban crédito a cualquier "homeless", y las agencias que estimaban el riesgo miraban para otro lado: ¿cómo iban a aguar la fiesta?, ¿quién se atrevía a poner el cascabel al gato, a pinchar la burbuja? Incluso las estadísticas oficiales y el banco de España callaban y dejaban hacer. Y Aznar y los suyos soplaban y soplaban, haciendo crecer la burbuja, ayudados por el dinero barato proveniente de Europa, y ocupando puestos de relevancia a nivel mundial. Ya teníamos más AVES que en Francia, y también mejores autopistas, y, sobre todo, muchos más corruptos, la mayor parte aforados.

Y mientras tanto, en Estados Unidos, un economista chino, David X. Li, que trabajaba en JP Morgan en la Unidad de Cuantificación de Riesgo financiero, y que soñaba con el Nobel de Economía, publicó un artículo que popularizó la fórmula de Cópulas Gaussianas, y que fue utilizada para acotar y revender el riesgo, convirtiéndose en el instrumento financiero favorito de los tiburones de Wall-Street. Nadie quiso oír las críticas hechas a este modelo por economistas de prestigio de algunas universidades americanas, porque la cosa funcionaba, y el dinero fluía y se multiplicaba como los panes y los peces. Incluso ponían a Jesucristo como ejemplo. Me recuerda a cuando predije que Ingeniería Geológica fracasaría porque esta titulación estaba mal diseñada y me acusaron de envidioso. El tiempo me dio la razón. Predigo ahora lo mismo con los dobles grados universitarios, pero este tema lo desarrollaré en otro artículo.

Ya ven cómo terminó la fórmula de cópulas. Ya ven cómo está terminando la época de Aznar, con medio partido imputado en temas de corrupción y con el modelo económico "burbujero" desprestigiado. ¿Sabían que Luis De Guindos, nuestro pirómano-bombero, llevaba la batuta de Lehman Brothers en España y Portugal en 2008, cuando la entidad quebró por el escándalo de las hipotecas "subprime"? Anteriormente, fue director General de Política Económica y Defensa de la Competencia. ¡Vaya broma, es como poner al enterrador a reavivar al muerto! También Draghi, presidente del Banco Europeo, fue Vicepresidente de Goldman Sachs, uno de los principales responsables de la crisis griega, al esconder el déficit griego en 2001 y 2002.

Y lo peor es que pide que vuelva la burbuja inmobiliaria, porque dicen que ya pasó tiempo suficiente y que el mercado se recupera. Desde entonces ha crecido la burbuja futbolera, con fondos de inversión que invierten en futbolistas y en derechos de imagen y televisión. A ver si de esta terminamos cargándonos los bancos que quedan, después de haber saqueado las cajas. ¿Dónde está el Banco de España para establecer límites, y la Agencia Tributaria para cobrar deudas? Hasta José Mari se ha cortado el bigote y ya no pone los pies encima de la mesa. Nada volverá a ser como antes. Ni siquiera el "caluret". Toca enterrar el pasado. ¿Quién enterrará al PSOE? Casi seguro que PP y PSOE terminan copulando. Ya se oyen los gemidos. Mariano resiste hasta que todo se desplome: modelo falla Calaveras, la del Big One. ¿Desaparecerá Hollister?

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