La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

LNE FRANCISO GARCIA

Billete de vuelta

Francisco García

Zoo loco

Átense los machos que el final de los tiempos se aproxima: jabalíes que ozan en manada a las puertas de las casas, asustando a los vecinos, y que cualquier día bajarán del monte en excursión de piaras hasta la calle Corrida para darse un festín en una terraza de la calle Corrida, tal que los guiris de un crucero de El Musel; gaviotas cabreadas como los pájaros de Hitchcock que han decidido retirar su voto en Gijón al PP por confundirlas con un charrán, que es pájaro de mejor agüero; hormigas que se anunciaron laboriosas cuando colonizaron la sede consistorial y que se han vuelto gandulas como cigarras de las fábulas de Samaniego; caballos trotones que abandonan al galope el Chas, en busca de otras yeguadas; y para colmo, vacas que se cuelan en la finca del vecino a darse un baño en la piscina y que echan dos horas nadando en la pileta, como una Mireia Belmonte de Castiello y tetrabrick...En un pequeño pueblo de Estados Unidos, la emisora local basa su pronóstico meteorológico en el comportamiento de unas cabras que pastan en una colina cercana. Y su acierto es elevadísimo, según parece. Si habrá que llegar a sustituir al hombre del tiempo por un macho cabrío será que los humanos estamos como cabras.

Algo está ocurriendo, hechos indescifrables que desatan una repentina locura en la fauna incluso doméstica, como si presintiera acontecimientos telúricos que van a sacudir a esta ciudad y sus cimientos. ¿Será una estrategia de Xixón Sí Puede y sus etólogos? Ustedes, por si las moscas, pongan sus pecados en orden y recuperen de la videoteca de RTVE los programas de María Luisa Seco en "Zoo Loco".

Compartir el artículo

stats