El alcalde de Siero, con 46 denuncias, todas archivadas menos una, no descarta seguir en política si se diera el caso de tener que dejar el PSOE

"Llevo muchos años sufriendo esta situación en silencio y en completa soledad", dice el regidor sobre las demandas judiciales, 12 de ellas por vía penal

Ángel García, con varios archivadores donde guarda las denuncias interpuestas contra él, durante los últimos cinco años.

Ángel García, con varios archivadores donde guarda las denuncias interpuestas contra él, durante los últimos cinco años. / L. R.

L. Rodríguez/ P. Tamargo

Un total de 46 causas, 12 de ellas por la vía penal, es la cifra de denuncias que acumula el alcalde de Siero, Ángel García. El periodo de reflexión tomado la semana pasada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha llevado al regidor a hacer un balance de todas las denuncias que ha recibido desde el 2019. "Nunca he pensado en dimitir, pero sí en no continuar, porque yo llevo muchos años sufriendo esta situación en silencio y en completa soledad", dijo este sábado en rueda de prensa. No obstante, dio a entender que podría seguir en política si se viese obligado a dejar el PSOE como consecuencia de alguna de estas demandas. "Si tengo la conciencia tranquila y me gusta mi trabajo en el Ayuntamiento, por qué no voy a seguir", señaló.

Del total de denuncias de las que dio cuenta, "algunas de ellas son contra el Ayuntamiento, pero también me implican a mí indirectamente", detalló García.

Exceptuando la última denuncia interpuesta por el portavoz del Partido Popular en Siero, José Luis Berros, por el asunto de las cesiones del uso de las instalaciones deportivas, que aún está en tramitación, "el resto están todas archivadas".

García especificó que "todas las denuncias están puestas, de manera sistemática por el Sipla y Podemos Siero", que, a su juicio, "pretenden instrumentalizar la justicia para conseguir así lo que no le dan las urnas".

El primer edil reconoce que "he pasado momentos muy malos, pero psicológicamente estoy fuerte y, actualmente, diría que me encuentro en mi mejor momento". Aún así, lamenta que "este tipo de situaciones se permita y que no se tomen medidas al respecto".

El regidor señala que lo que buscan este tipo de actuaciones judiciales es hacerle dimitir o que su partido, lo expulse. El código ético del PSOE establece que sus cargos públicos deben dimitir en el momento de la apertura del juicio oral por un procedimiento penal, sin esperar a la sentencia. En el momento en que se les comunique dicha apertura están obligados a dejar el cargo y solicitar la baja voluntaria en la organización. "En caso contrario, será suspendido cautelarmente de militancia y, en su caso, expulsado del partido", señala dicho código.

La denuncia del PP por supuestas irregularidades en la cesión de instalaciones deportivas es por vía penal. Aunque el regidor no la mencionó, sí reflexionó acerca de qué ocurriría si se le abriese juicio oral por alguna causa y si seguiría en política aunque tuviera que ser fuera del PSOE.

"Espero que no llegue a ese punto porque sería una muy mala noticia, espero que no haya motivos para ello, no doy motivos para que eso ocurra y, hombre, si ocurriese, pues si tengo la conciencia tranquila y el Ayuntamiento me gusta mucho y el trabajo que hago pues por qué no voy a seguir", dijo.