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Presidente del Colegio de Odontólogos de Asturias

En salud bucodental, no todo vale

Contra la publicidad supuestamente engañosa en algunos tratamientos odontológicos

La protección de la salud es un derecho fundamental de todos los ciudadanos. No conozco otro mayor y por supuesto éste incluye a la salud bucodental, la que afecta a nuestra boca, encías y dientes. Si bien es cierto que desde el Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Asturias somos conscientes de que cada vez más la población está concienciada con la importancia de su salud oral, sí detectamos una creciente banalización de la actividad clínica del dentista y de la publicidad supuestamente engañosa o inductora de ciertas expectativas terapéuticas, que pueden esconder una clara actividad comercial y mercantilista.

Cada vez nos encontramos con más casos de supuestas ofertas en tratamientos dentales que pueden ocultar en letra pequeña costes no anunciados o prestaciones gratuitas cuando realmente forman parte de los propios tratamientos. Por favor, en medicina, no todo vale. ¿Promociones y regalos por tratamientos? ¿De verdad estamos hablando de nuestra salud? Este tipo de prácticas son impensables en otros ámbitos de la medicina. ¿Se imagina que le hicieran una promoción cuando va al médico de cabecera o cualquier otro especialista? ¿Por qué sí pasa con la odontología?

Basta ya de la publicidad basada principalmente en la competencia en precio, letra pequeña, supuestas garantías de por vida y tratamientos gratuitos.

La salud no puede ser objeto de técnicas y tácticas publicitarias inveraces y supuestamente engañosas, donde únicamente primen cuestiones mercantilistas y de interés comercial. En Asturias hay excelentes dentistas y un nivel muy alto y cualificado en odontología como para que llevemos al engaño con falsas expectativas de curación y tratamiento de patologías, que pueden además inducir a un sobretratamiento innecesario.

Animo a los ciudadanos a demandar de su dentista un trato en el que prime su salud y el tratamiento de sus patologías, en definitiva una atención como "paciente", y rechazar aquellas acciones o actitudes de trato como cliente, donde prime el acto mercantilista y el importe de la factura final. Igualmente animo a que demanden de su dentista que le acompañe en todo el proceso terapéutico, desde el diagnóstico hasta el tratamiento final, respetando en todo momento sus derechos.

Animo al ciudadano a que exija, antes de iniciar cualquier tratamiento, el precio final del mismo, así como todas las variaciones que puede ir sufriendo en función de su evolución. Se debería desconfiar si el diagnostico y el plan de tratamiento es explicado por un comercial o una persona no cualificada, solo el dentista puede establecer un diagnóstico y prescribir un tratamiento. También es aconsejable revisar la letra pequeña de los presupuestos evitando sorpresas con una serie de costes adicionales que no están incluidos en el precio publicitado. Asegúrese y exija que el dentista se encuentre colegiado y facilite su número, además de su nombre. Es una obligación del dentista y un derecho del ciudadano. Y si lo desea, en el Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Asturias podrá, además, comprobar la información facilitada en caso de duda.

Desde el Colegio exigimos a la Administración una mayor regulación de la publicidad sanitaria, evitando así casos de publicidad inveraz y engañosa que pueden poner en riesgo la salud de los pacientes. Toda la publicidad de los servicios sanitarios que se prestan en las clínicas dentales deberían estar controlados por las autoridades competentes para garantizar que llegamos al ciudadanos con un mensaje trasparente, exacto y veraz. Porque la salud -también la bucodental- no es un producto que se compre o se venda, no comercialicemos con ella.

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