Los antropólogos siempre pensaron que nuestros antepasados podían haberse cruzado con los neandertales. Pero nadie había conseguido demostrarlo con rigor hasta que apareció en escena Svante Pääbo, flamante premio "Princesa de Asturias" de Investigación Científica y Técnica 2018. Para ello Pääbo recurrió al análisis genético de ADN fósil. Así consiguió un hito histórico: la secuenciación del genoma completo del neandertal. Mediante comparaciones fue entonces cuando pudo verificar que aproximadamente un 2% de nuestro genoma lo compartimos con los neandertales, lo cual corrobora que hubo cruce. ¡Tuvimos sexo con los neandertales! Esto es así para los humanos que un día abandonamos África. Sólo los africanos se quedaron sin ADN neandertal, al no haber existido cruce en África.
