La creación de un núcleo poblacional estable de quebrantahuesos en los Picos de Europa está cada vez más cerca, después de que ayer se soltaran allí dos nuevos pollos, "Jana" y "Julia".
Los ejemplares, que fueron criados en un centro especializado de Aragón y llevaban varios días aclimatándose en unos jaulones en el Picu Llucia, se suman a los dos ya liberados el pasado 29 de junio, "Cares" y "Vitorina". Un nuevo compañero de vuelo, "Escudero", será liberado cuando complete su desarrollo motor, en unos diez días. Todos llevan anillas metálicas y marcas alares para facilitar su seguimiento. Los cinco polluelos se suman a los ejemplares ya liberados en campañas anteriores: "Deva", "Atilano", "Biziele", "Quebrantina" y "Esperanza", además de "Casanova" que llegó por su propia cuenta de los Pirineos y decidió quedarse.
La primera en abandonar el jaulón a pie fue "Jana". Lo hizo pasada la una del mediodía, menos de una hora después de que miembros de la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ) le abrieran la puerta. Más reticente se mostró su compañera, cuyos movimientos fueron seguidos a una prudencial distancia por un séquito de técnicos y amigos de la naturaleza encabezado por la consejera de Desarrollo Rural, María Jesús Álvarez, y su homólogo aragonés, Joaquín Olona.
Expandir la población
Los dos dirigentes políticos pusieron en valor la cooperación entre las dos comunidades autónomas para sacar adelante el proyecto de conservación del quebrantahuesos en los Pirineos y su recuperación en los Picos. "La conservación de la especie y el mantenimiento de la biodiversidad sirven también para el desarrollo local y para dar valor al territorio", dijo Álvarez, que lamentó que la persistente niebla impidiera una visión mejor de la suelta. En la misma línea se expresó Olona que hizo hincapié en la necesidad de expandir el núcleo poblacional de los quebrantahuesos más allá de los Pirineos. En este sentido, está previsto que el próximo año se suelten otros seis o siete ejemplares.
"Lo ideal sería tener un contingente mínimo residencial de 20 en los Picos", apuntó el director de la FCQ, Gerardo Báguena, que agradeció el respaldo político e institucional a la iniciativa, que forma parte del proyecto europeo "LIFE+Red Quebrantahuesos 2013-2018". Báguena se mostró optimista sobre la posibilidad de reproducción de los quebrantahuesos en la zona tras la afinidad mostrada por "Deva" y "Casanova", a los que incluso se les llegó a ver construir una especie de nido en años anteriores. "No habrá sidra suficiente en Asturias para celebrarlo cuando suceda", remarcó.
También hizo hincapié en que se ha logrado la eclosión de embriones procedentes de unidades reproductivas que llevaban 25 años sin aportar individuos, lo que permite dar variabilidad al acervo genético de la especie, en peligro de extinción.
