Casi sesenta años después, la capilla de San Juan de Sardéu, en Ribadesella, volverá a engalanarse mañana, sábado, para celebrar una boda. Moraima Junco Gutiérrez, del barrio de Rucales, en Sebreñu, y Pablo Suárez Bravo, de Llinares, se darán el "sí, quiero" y presidirán a continuación el convite de boda en una carpa instalada en la finca del palacio de Sebreñu, también conocido como de los Junco, cuyos propietarios son parientes de la novia. La última boda que se celebró en la capilla de Sardéu fue la de Sita Martínez Mier, que vive en Fresnu y hoy tiene 87 años, y su difunto marido, José Traviesa Tirador. Sita Martínez Mier rememoraba ayer su boda, y deseaba "lo mejor" a Moraima y Pablo. "Son muy buenos rapaces y de muy buenas familias", destacó.
Moraima Junco y Pablo Suárez pondrán fin mañana a 13 años de noviazgo y se irán a vivir a Llinares. De momento, no se marcharán de viaje de novios, porque la organización de la boda les ha absorbido todo el tiempo en los últimos meses. "Nos pusimos a organizarlo todo muy tarde, en primavera", señaló la novia, que añadió que el viaje llegará "cuando sea posible".
Será una boda especial por muchos motivos. Uno, que habrá dos madrinas y ningún padrino. Ello porque la novia perdió a su padre, Juan José Junco, que fue alcalde de Sebreñu, hace dos años y no quiso "sustituirlo por ningún otro". Así, actuarán como madrinas la del bautizo de la novia, Elena Valdés, y la madre del novio, María Teresa Bravo. También será la de mañana una jornada especial para el sacerdote que casará a esta pareja riosellana, José María Orviz, dado que no solo será la primera boda que oficia en la capilla de San Juan de Junco, sino también, muy probablemente, la última que presidirá, pues su jubilación está próxima y antes quiere tomarse un descanso, según trasladó a los contrayentes. Asimismo será especial la celebración de Sardéu porque el catering correrá a cargo del cocinero con más estrellas Michelin de Asturias, Nacho Manzano, todo un maestro de la cocina. Nueve niños llevarán las arras. Habrá 150 invitados. Y actuará el grupo folk riosellano "P'Amuskis"
El novio es músico, vocalista del grupo rock "Almatrampa" (antes militó en "Aprieta'l Kulo", e hijo del conocido abogado, ya fallecido, Miguel Ángel Suárez Cuétara. La novia es esteticista, aunque en la actualidad no ejerce como tal, y organizó junto a una amiga durante 16 años la fiesta de San José en Sebreñu. Fue la que eligió el lugar del enlace, y lo hizo porque lleva el mismo nombre que su padre y porque queda "a medio camino entre Rucales y Llinares", señaló. También decidió contratar todo con "gente de la zona", para que "el dinero se quede aquí".
También ella fue la que quiso celebrar el convite en el palacio de Sebreñu. Aparte de que los propietarios son parientes suyos y que es el edificio con más solera de su pueblo, le tiene "mucho cariño a aquel lugar. Estamos enamorados de aquel sitio", añadió la futura esposa, que se vestirá de blanco para la ceremonia (él irá de chaqué).
