Las viejas casas semiderruidas de la calle Armando Collar, en San Lázaro, ya han sido derribadas por la empresa que impulsa la reforma de esta pieza urbana, Eurofar 2002. Se inicia así la transformación del entorno del antiguo Instituto Clarín, en el barrio de San Lázaro, una zona que ha llegado a estar muy degradada, suscitando numerosas quejas vecinales, pero que por su cercanía al Parque de Invierno y a los futuros accesos previstos por el Plan General desde La Manjoya está llamada a ser, según definen técnicos municipales, «una nueva puerta de Oviedo».

En Armando Collar el plan especial prevé la edificación de 226 viviendas, en edificios de seis plantas. Este plan enlazará el barrio de San Lázaro con el futuro desarrollo del ámbito urbanizable San Lázaro, donde el Plan General autoriza 481 viviendas, en más de 80.000 metros cuadrados entre este barrio ovetense y la ronda exterior de la ciudad. Este ámbito, sin embargo, no está aún en de_sarrollo, según señalan fuentes municipales. Sí están en tramitación unidades de gestión cercanas, como las de El Monticu y Armando Collar 1 y 3, y con el plan especial que impulsa Sedes para el Instituto Clarín, donde se ha planteado la construcción de dos torres de altura desigual del arquitecto navarro Patxi Mangado. En total, en el entorno de esta parcela se están tramitando, en distintas fases, planes para edificar 400 viviendas, además de las que se planteen en el plan especial del Instituto Clarín, que podrían rondar las 200 viviendas.

«La transformación de este borde de ciudad, que pese a su cercanía al Parque de Invierno es un residuo de tiempos pasados, ya ha comenzado. Hemos autorizado el derribo de los edificios en ruinas y la retirada de los escombros, pese a que aún no está aprobado definitivamente el proyecto de urbanización. Esperamos que las obras puedan comenzar en pocas semanas, y siempre dentro del plazo de tres meses que dimos a los vecinos en una reunión celebrada recientemente en San Lázaro», señaló el concejal de Urbanismo, Alberto Mortera.

El plan especial de Armando Collar afecta a 19.987 metros cuadrados, en las cercanías del antiguo Instituto Clarín. El Plan General establece una cesión de 2.766 metros cuadrados para espacios libres de uso público, 1.930 para equipamientos y 3.992 metros para «viario estructurante de primer nivel», ya que por estos terrenos pasa la futura «ronda intermedia», que unirá la ciudad con los desarrollos residenciales de La Manjoya y que desembocará en la carretera a San Esteban de las Cruces. Este viario tendrá una anchura media de 20 metros, y llegará a la gran glorieta o plaza que el Ayuntamiento proyecta para la parcela del Clarín, uno de los motivos por los que se consideró más adecuada la edificación en altura en esta zona.