Chus NEIRA

La coalición de Izquierda Unida mide sus fuerzas y busca una reorganización de lo que cree que es su estructura natural de la cara a las próximas elecciones. Después de que el pasado mes de enero Cayo Lara hiciera un llamamiento a la pacificación de los territorios alzados en armas por los conflictos con el PC, y a pesar de los matices con los que entonces el coordinador regional, Jesús Iglesias, salvó de aquella amnistía a los del entorno del secretario general del PCA, Paco de Asís Fernández, y a los que habían concurrido bajo otras siglas a las elecciones, algo se mueve en el partido en Oviedo.

El coordinador municipal de la coalición, Alejandro Suárez, aseguró la pasada semana a LA NUEVA ESPAÑA, al ser preguntado por la coincidencia de su estrategia política con la de la Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda, con el portavoz municipal Roberto Sánchez Ramos, en el Ayuntamiento, expulsado de IU, que «las nuevas luchas como el Palacio de Justicia o el acuerdo de "Villa Magdalena", ojalá den como conclusión que la izquierda transformadora converja en una única oferta política, que es lo que nos demanda el cien por cien del electorado de esa izquierda transformadora en la ciudad». Preguntado por la posibilidad de haber iniciado negociaciones para volver a sumar a Roberto Sánchez Ramos en la coalición, Suárez se limitó a un escueto «siempre se dan pasos».

Históricos militantes de IU que ya habían estado apoyando la campaña de la Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda en Oviedo y que también habían sido expulsados, ya han reingresado en la coalición, y según fuentes próximas al entorno de IU y del PC una y otra parte llevarían ya un mes de conversación. Siempre según estas fuentes, Izquierda Unida ya habría ofrecido a Roberto Sánchez Ramos la cabeza de lista para las próximas elecciones municipales de mayo de 2011.