El Ayuntamiento tiene previsto iniciar este mes la limpieza de las pintadas de los edificios y el mobiliario urbano del casco histórico de la ciudad. Los trabajos para borrar las firmas y pintadas del Oviedo antiguo cuentan con un presupuesto de 98.518 euros.

Para eliminar las pintadas se utilizarán chorros de agua, rascado manual y chorros de sílice y de polvo de vidrio.

En toda la ciudad se limpian cada año unas 50.000 pintadas en las fachadas y el mobiliario urbano, lo que supone un gasto anual para las arcas municipales de 215.000 euros, según los datos del Ayuntamiento. Para estos trabajos se han habilitado dos furgonetas equipadas con máquinas especiales para este tipo de tratamientos.

El casco viejo es la zona de Oviedo más afectada, y la que más dinero cuesta limpiar, ya que abundan los edificios protegidos y los monumentos que exigen tratamientos especiales para retirar las marcas.

La lucha contra las pintadas no se limita a las tareas de limpieza. La Policía Local ha destinado una patrulla específica de agentes para evitar las marcas en fachadas, bancos, farolas, autobuses o señales de tráfico.