24 de octubre de 2003

Alrededor de las 15.45 horas de aquel día, y durante la construcción del edificio de la Consejería de Hacienda en la calle Hermanos Pidal, dos operarios se precipitaron al vacío después del desplome del andamio sobre el que trabajaban.

Las acusaciones

La fiscalía imputó a nueve personas como responsables del accidente, entre peones y directivos de las empresas que participaban en la obra. A cada uno de ellos los acusa de un delito contra el derecho de los trabajadores en concurso con dos delitos por homicidio imprudente y otro de lesiones imprudentes. Para cada uno el ministerio fiscal solicitaba una pena de tres años. Seis de los acusados llegaron a un acuerdo para no entrar en prisión.