Millones de euros esconde nuestro mercado en la «caja B», bajo el colchón, en el calceto, en el alero del hórreo y en las Caimán. Cárteles de coca, traficantes de Viagra y angula, chalanes, rufianes y guardaízas, prevaricadores, empresarios precavidos, melancólicos ficticios con baja laboral pero con huerto, tarotistas y calientamóviles, hackers, crackers y otros corsarios, albañiles del sábado, submarinistas y desatascadores, mecánicos de confianza, testigos falsos, peritos judiciales verdaderos, abogados buscagrietas, vendedores de escaños, alquimistas que elevan al cubo el metro cuadrado, negros que ofertan discursos de toda índole, firmones, asfaltadores de erías, entrenadores salvadescensos, falsificadores de orlas... Todos declararán su pan «B» y su chalé por un diez por ciento, y se pondrán a bien con don Mariano en esta semana de Pasión.