Más de un centenar de personas, muchos de ellos niños, decidieron despedir el año participando en una iniciativa solidaria. Entre los participantes en la carrera "San Silvestre" destacaban numerosos corredores con una llamativa camiseta con la etiqueta "silla roja". Se trata de los corredores, la mayoría no profesionales, que decidieron realizar la marcha por una buena causa, enfundados en la camiseta de la asociación Entreculturas. El objetivo era recordar y reivindicar que más de 57 millones de niños en todo el mundo no pueden acceder a la escuela.

"Gracias a los voluntarios, socios y amigos de Entreculturas se congregó un buen número de personas que corrieron en Oviedo por la educación", aseguran los portavoces del colectivo.

Antes y después de la carrera muchos acudieron a hacerse fotos para recordar el momento. La más multitudinaria reunión a un nutrido grupo de corredores de todas las edades por la tarde en el Campo San Francisco, junto a la escultura de Mafalda. Además, el tercer clasificado en la categoría absoluta de la "San Silvestre" ovetense, Víctor Fernández Díez, se puso la camiseta de la asociación Entreculturas para mostrar su apoyo a la asociación.