"Puede decirse que Limam está curado", afirma el pediatra Andrés Concha en alusión a Limam Omar, un niño saharahui de once años que en abril de 2013 fue sometido a un trasplante de médula ósea en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Afectado por una leucemia mortal, fue salvado "in extremis" por Budbuda, el único de sus cuatro hermanos que podía donarle la médula que necesitaba, el único compatible, pese a que Limam es del Madrid y su hermano del Barça.
LA NUEVA ESPAÑA se topó con Limam Omar en la uci pediátrica del HUCA cuando acababa de someterse a una prueba para revisar la evolución de la enfermedad. Aún estaba medio amodorrado como consecuencia de la sedación. El seguimiento lo lleva el servicio de hematología, pero el análisis ha sido realizado en una de las camas destinadas a técnicas anestésicas. A su lado, su madre, Jadijetu Jalifa, sonríe y aguarda a que su hijo se recupere. Todo un éxito de esos robustos lazos de solidaridad entre Asturias y el desdichado pueblo saharaui.
El doctor Corsino Rey, jefe de la sección de cuidados intensivos pediátricos del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), ha sido elegido presidente de la Sociedad de Pediatría de Asturias, Cantabria y Castilla-León, una organización muy activa y que agrupa a más de un millar de profesionales de las tres comunidades. En la imagen de la izquierda, el responsable de la uci pediátrica aparece con parte de su equipo. De izquierda a derecha, de pie, Virginia Rubio, Luisa González, Antonia Villamil, Silvia Fernández, Corsino Rey, Laura Díaz, Juan Orviz y Julio García Maribona; agachados, Yolanda Díaz y Andrés Concha.
