Las marcas de neumáticos de la última carrera ilegal de coches aún pueden verse en las calles de las nuevas zonas residenciales de La Corredoria. Los vecinos están hartos de esta molesta práctica nocturna que consideran un peligro y que, en ocasiones, lleva implícito un turbio asunto delictivo: el robo de coches para competir. Los vecinos se han quejado en las últimas semanas a la Policía Local y también se han dirigido al Ayuntamiento de Oviedo exigiendo que coloque badenes en las calles para que dejen de ser el circuito clandestino favorito de algunos. Piden acabar con las noches de "Fórmula 1" en sus calles.

Según han denunciado los residentes afectados, en conversación con este periódico, las carreras parten del antiguo centro comercial de la calle José Remís Ovalle, que los participantes utilizan como punto de encuentro, al estar cerrado y disponer de un aparcamiento. Desde ahí los "pilotos" se desplazan a toda velocidad por la calle Josefina Argüelles, dando la vuelta hacia José Noriega, en dirección a una glorieta y después al tanatorio, en el límite con Lugones y el municipio de Siero. Los vecinos también aseguran que en más de una ocasión han provocado daños en el mobiliario urbano. Por ejemplo, en la calle Josefina Argüelles, a la altura de los números 11 y 13, existe una valla que han tenido que reponer en varias ocasiones tras producirse choques. "No miden la frenada y se dan de golpe con la valla, ya la tuvieron que reparar varias veces", explica un residente de la zona. Los vecinos aseguran que en los últimos tiempos las carreras van a más, realizando carreras nocturnas incluso cuando llueve, para hacer más espectacular la competición.

Hace un año la Policía Nacional detuvo a tres personas acusadas de robar coches en diferentes puntos de la ciudad para competir con ellos en carreras ilegales, al filo del amanecer, en La Corredoria. Los tres individuos, viejos conocidos de las autoridades, robaron durante la misma noche tres turismos en Oviedo: los tres elegidos a conciencia. Eran coches del mismo modelo y de la misma potencia para equilibrar la prueba. Los tres vehículos fueron forzados y para arrancarlos los ladrones hicieron un "puente". Tras las detenciones, las competiciones ilegales aflojaron durante un tiempo, pero ahora han vuelto a las carreras.