Los hosteleros de la calle Gascona repartieron ayer más de mil raciones de una fondue muy especial, elaborada con quesos artesanos asturianos y sidra en lugar de vino blanco. La fondue, servida en cazuelas de barro con unas tostadas de pan, fue la estrella de la I Feria de quesos artesanos "Quiero Ques-arte" que se organiza en Oviedo y que, a juzgar por el éxito, seguro que repetirá el próximo año.

El domingo soleado y las buenas temperaturas ayudaron a que solo una hora después de la apertura de la feria, los hosteleros de Gascona ya hubieran repartido 360 raciones de fondue. El encargado de dirigir toda la maniobra, y también el autor de la receta, fue el cocinero Christian González. "Hicimos varias pruebas y al final salió muy bien. Normalmente la fondue se hace con un par de quesos, lo complicado era mezclar toda la gama, con siete quesos. Además, por primera vez se utiliza sidra en lugar de vino", manifestó. Cada pota de fondue tenía una capacidad de 35 kilos y el plato fue elaborado en distintos restaurantes de Gascona que desde el día anterior tenían todo el material preparado.

El sabor de la fondue asturiana fue del gusto del público y más de uno repitió. "Está buenísima", coincidieron los canarios Miguel Perdigón y Daura González, que están estudiando en Oviedo desde el pasado mes de septiembre y solo habían tenido tiempo a probar el queso Cabrales. "La feria está muy animada, teníamos ganas de pasarnos un domingo por Gascona", explicaron.

Beatriz Arango creyó que la mecánica de la feria quesera sería similar a la "preba" de la sidra, cuando el público compra un vaso y va probando toda la cosecha. En este caso, los 5 euros de la inscripción en la feria no servían para catar los quesos del mercado, sino para probar la fondue. "Está muy rica y puedes repetir las veces que quieras. Además, te llevas la cazuela a casa, que es muy chula", indicó Beatriz Arango, que pasó la mañana del domingo en Gascona acompañada por Visi López, Tom Fernández y Martín Arango.

Al margen de la fondue, a lo largo de la calle Gascona se desplegaron los puestos de venta de quesos artesanos, con presencia de veintitrés productores y cuarenta clases diferentes de quesos. Ana Celorio, de la quesería Bedón del barrio de Frieras, en Posada de Llanes, destacó la importancia de poder exhibir sus productos a un escaparate único como la calle Gascona. Quesos artesanos de vaca, de cabra y mezcla de ambos. Para todos los gustos y para todos los bolsillos. La feria "Quiero Ques-arte" dejó en su primera edición muy buen sabor de boca.