La Casa de Acogida de mujeres maltratadas que gestiona el Ayuntamiento de Oviedo registró un 30 por ciento de usuarios (las víctimas y sus hijos) más en 2015 que en el año anterior. Según los datos facilitados ayer por el Ayuntamiento, este recurso atendió a lo largo del año 2015 a un total de 200 víctimas, de las cuales 104 fueron menores, hijos e hijas de las mujeres atendidas. De estas atenciones, 161 víctimas han tenido que ingresar en la casa para su recuperación, 80 mujeres y 81 menores, 46 personas más que en el año 2014. Las cifras son bastante superiores a las registradas el año anterior. Según los datos que constan en la memoria del año anterior, el 2014, este año se prestó atención a 71 usuarias y a 70 menores (141 en total). De este grupo, 13 usuarias son mujeres que habían ingresado en el año anterior y que salieron de la institución a lo largo del año. Esto significa que durante el año 2014 ingresaron en la casa de acogida 58 mujeres, 56 hijos y también el nieto de un víctima de malos tratos.

De los mismos datos facilitados ayer por el Ayuntamiento de Oviedo se desprende que de las 80 mujeres que ingresaron en la Casa, contaban con una orden de protección 44 de ellas. Finalmente, el número de seguimiento de casos de Violencia de Género con órdenes de protección realizados a lo largo del año 2015 fue de 98 de los que 95 tuvieron una sentencia condenatoria a su favor.

Desde la Asesoría Psicológica, otro servicio del Centro Municipal de la Mujer, se atendieron el año pasado un total de 1146 consultas de 386 mujeres, de las que 226 fueron nuevas usuarias. De éstas, 148 presentaban como problemática principal la Violencia de Género, dato ligeramente inferior a los casos tratados el año anterior, y 54 de ellas tenían concedida orden de protección. Por otro lado, el área jurídica dio respuesta a 1250 consultas que han sido formuladas por 700 usuarias a lo largo del año en este servicio. De ellas, 502 mujeres acudieron por primera vez a este recurso municipal.

"Queremos ofrecer una atención integral y para eso ha de haber un espacio en el que todas las partes puedan evaluar y trabajar juntas. La atención a las mujeres y menores no puede limitarse a las fuerzas de seguridad y los recursos específicos para igualdad", explicó ayer la concejala de Atención a las Personas e Igualdad, Marisa Ponga (PSOE).