El Ayuntamiento confía en que, de tener que hacerlo, pagar únicamente 300.000 euros por la expropiación de la Loma del Canto, una extensión de suelo urbanizable de más de 10.000 metros cuadrados situada en la parte trasera del polideportivo de Vallobín, y no los casi 4 millones que exige uno de los propietarios del suelo. Y es que la historia del desarrollo de la Loma del Canto se ha complicado tras la decisión del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Oviedo de no declarar nula la expropiación, tal y como confiaba el municipio.

El relato de este lío judicial-administrativo arranca con la conformación de la junta de compensación -la sociedad creada que forman los propietarios de un solar para su desarrollo urbanístico- en tiempos en los que gobernaba el PP. En ella tenía una presencia mayoritaria la constructora Urbana de Viviendas S. A (Urvisa), además de otras promotoras y pequeños propietarios. En 2010 se decide la expropiación de la parte del suelo de aquellos propietarios que rehusaron sumarse a la junta de compensación. Tras varios recursos, los tribunales establecieron en noviembre de 2012 un precio (justiprecio) para abonar a éstos propietarios la expropiación de 3,24 millones.

Paralelamente, el Ayuntamiento trató de paralizar la expropiación alegando que una pequeña parte del solar ya había sido expropiado tiempo atrás para hacer un nuevo aparcamiento y mejorar los accesos al campo de rugby del Naranco. Todo ello en medio de la crisis del ladrillo, que acabó con Urvisa y el resto de las promotoras que tenían intereses en la junta de compensación de la Loma del Canto en quiebra. Desaparecidas las empresas, sólo queda "con vida" dentro de la junta de compensación el Ayuntamiento de Oviedo. Y es a él al que los propietarios litigantes reclaman los 3,24 millones de la expropiación, que serían casi 4 millones con los intereses acumulados.

En todo caso, el municipio entiende que de tener que pagar -el tripartito alega que nunca se ocupó la parcela- sólo debería hacer frente a la parte proporcional que le correspondería como propietario de una pequeña porción de suelo. Lo que en euros se traduciría, aproximadamente, en unos 300.000 euros.