Los taxistas que trabajan en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) califican de "caos circulatorio" el tráfico del recinto. Son reacios a llamar a la grúa, porque no quieren "fastidiar" a un ciudadano, pero aseguran que en ocasiones es difícil trabajar porque se encuentran con coches ocupando el lugar reservado para que trabajen los taxistas. "La gente no quiere pagar el parking y buscan alternativas, una de ellas es ocupar las paradas del taxi. Nosotros no llamamos a la grúa, suelen dejar a alguien dentro del coche y simplemente les advertimos", explica Manuel Arnaldo Alba, de Asotaxi.

Para los taxistas, los malos hábitos de aparcamiento no son el mayor problema del HUCA, sino la entrada de autocares interurbanos, un asunto que está judicializado: los taxistas denuncian que la entrada de estos coches en el hospital es ilegal. "Estamos trabajando poco desde que los autocares entran en el hospital. Entendemos que no están autorizados para ello, que deberían llegar a la estación, y desde ahí que el ciudadano elija si desplazarse en autobús urbano o en taxi; esperamos que la justicia nos de la razón.", indica. Los taxistas también se quejan de que la entrada por Consultas Externas está "mal planteada" porque canaliza la mayoría del tráfico por el mismo sitio.