Los familiares del matrimonio ovetense fallecido el pasado viernes en Cuba a causa de un accidente de tráfico iniciarán hoy lunes los trámites para repatriar los cadáveres y traer a Asturias a la hija de la pareja. La familia aspira a acelerar el viaje de la pequeña Alicia, de cinco años, y tiene asumido que el traslado de los cuerpos de Javier Ramón Martínez Romero y Eva Rodríguez Pérez deberá esperar un poco más.

"No podemos empezar las gestiones en el consulado y la embajada hasta mañana lunes", explicó en la tarde de ayer a LA NUEVA ESPAÑA Alicia Martínez Romero, hermana del finado. La conversación, por vía telefónica, tuvo lugar cuando los miembros de la familia que viajaron al país caribeño para realizar los trámites estaban llegando a Cayo Coco, localidad en la que residía el matrimonio. A través de un portavoz, la familia de los fallecidos pidió "la máxima discreción y el máximo respeto posible a la privacidad" en esta situación de dolor extremo.

Eva Rodríguez Pérez y Javier Ramón Martínez Romero sufrieron un accidente de coche el viernes, cuando viajaban a La Habana para asistir al concierto ofrecido por los "Rolling Stones" con motivo de la histórica apertura de una nueva etapa de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Sus familiares de Oviedo recibieron la noticia el viernes por la tarde. Anteayer, sábado, emprendieron viaje hacia la isla para hacerse cargo de los cuerpos de la pareja y recoger a su hija, que había quedado al cuidado de un matrimonio amigo, también español, mientras sus padres iban al concierto. En la tarde de ayer (hora española) llegaron al domicilio de la pareja en Cayo Coco, una isla de ambiente predominantemente turístico emplazada a unos 500 kilómetros de La Habana.

Violenta colisión

El matrimonio perdió la vida al colisionar de forma violenta contra otro vehículo (un autobús, según algunas versiones que no han podido ser confirmadas). Javier Ramón Martínez Romero, de 42 años, era ingeniero técnico de minas y trabajaba en la construcción de varios hoteles para una multinacional francosuiza. Eva Rodríguez Pérez, de 39 años, licenciada en Derecho, trabajaba como funcionaria de Justicia. El pasado mes de enero, la mujer dejó su plaza de funcionaria y se trasladó con su hija a Cuba, donde su marido llevaba más de dos años. La familia por fin se reagrupaba en Cuba después de haber vivido y trabajado varios años en Sevilla.