Otra cerámica es posible. Ese podría ser el resumen de la IV edición de la Feria Nacional de Cerámica Creativa "Cer. 0. 4." que se celebró este pasado fin de semana en la plaza de Trascorrales de Oviedo.

Más de 20 artistas de todo el país acercaron a la ciudad sus propuestas más innovadoras realizadas con este material, con las que confirmaron su merecido espacio dentro del mundo artístico. Tanto los ceramistas locales como los de otras comunidades autónomas cerraron esta edición con buen sabor de boca, pero no tanto por el nivel de ventas sino por la calidad de las piezas que se pudieron ver en los 16 puestos que conformaban la feria. "Las ventas importan, claro, pero importa más enseñar una cerámica que es arte, que supera esa línea comercial y tradicional", aseguró Pedro García, galerista y gestor del espacio "Dos Ajolotes" de Oviedo. Era el primer año que participaba en esta cita y, aunque reconoce que "no he vendido prácticamente nada", se marcha satisfecho.

En su espacio ha dado a conocer la obra de cuatro artistas completamente diferentes. Las esculturas femeninas de pared de la madrileña Teresa Guerrero; las impresionantes cabezas de aspecto marmóreo del asturiano residente en Extremadura Juan Pérez; los individuos aparentemente moldeables y una impactante cruz irregular de madera invadida por los restos de loza de la artista moscona Puri Trabanco; y la instalación "Abandono", que ocupaba toda la zona central de Trascorrales y que realizaron la artista italiana residente en Oviedo Daniela Zanzoni y la propia Trabanco. "Está realizada con restos de loza recogidos en la fábrica de San Claudio. Y es una crítica a ese estado de abandono y de mala gestión que se hizo del espacio y de algo tan valioso", afirma Trabanco.

Marta Rivera acudió este año por segunda vez a la feria ovetense desde León. "El año pasado me fue mejor. Traje un trabajo más enfocado a galerías y gustó más a la gente", afirmó. Pero, aunque las ventas no hayan sido las esperadas, centenares de personas se acercaron a sus esculturas de cerámica. "Son piezas únicas hechas de gres y cocidas en alta temperatura con óxidos. Están inspiradas en el deporte femenino". La artista, que lleva trabajando la cerámica desde el 94, utiliza para esta serie solo cuatro colores: el rojo, el azul, el blanco y el negro, con los que consigue mezclas que llaman la atención. Muy cerca de ella, Fernando Alonso, que viene desde Burgos, habla con los últimos visitantes que se acercan a la feria. "Es la primera vez que vengo, me animé porque muchos compañeros del sector me hablaron de ella, pero estoy vendiendo menos de lo que me gustaría", explica Alonso. Sin embargo, su serie de cuadros inspirados en la lluvia, realizados en madera lacada y cerámica, obligan a hacer una parada a todo el que pase por delante. "Empecé con la serie el año pasado y aunque hago muchas otras cosas, es lo que más gusta a la gente".

El artista asturiano Julio García asegura que "sobre todo el viernes, hubo más público del que esperábamos. La feria se está consolidando". Con sus diferentes líneas de trabajo, una de gres con óxidos y engobes, y otra realizada con una técnica de pintura a fuego, trata de satisfacer "a un público que ya busca esta cerámica artística. Aunque, desgraciadamente, sigue siendo minoritario en Asturias y en España".