Menos de dos días después de que su caso se hiciera viral en internet, la Jefatura Superior de Policía de Madrid archivó la denuncia que dos agentes interpusieron el domingo a la ovetense Belén Lobeto por las siglas inscritas en su bolso. La Policía interpretó que la letras "A. C. A. B." grabadas en el bolso negro que llevaba la joven significaban "All cops are bastards" ("Todos los policías son unos bastardos"), cuando en realidad el mensaje era "All cats are beautiful", que significa "Todos los gatos son bonitos".

Los agentes creyeron que las siglas (un acrónimo que se usa desde los años 70 entre bandas ultras y movimientos radicales para menospreciar a la Policía) eran un insulto hacia ellos y le aplicaron la conocida como "ley mordaza", que condena las faltas de respeto a los agentes en servicio con multas de entre 100 y 600 euros.

La Policía explicó ayer que la decisión de archivar la causa se debe "a las circunstancias" del hecho y a la "ambivalencia" que dan lugar las citadas siglas. Además, anunció que se ha abierto una investigación reservada para esclarecer los hechos.

"Estoy muy contenta de que todo se haya solucionado tan rápido", explicó ayer a este diario Belén Lobeto, que quiso agradecer a "todo el mundo que con su apoyo y su indignación" contribuyeron a difundir su historia. Lobeto tiene claro que la rectificación policial pocas horas después de conocerse su caso se debe a la "repercusión" de la historia ya que "si esto hubiera seguido para adelante no sabemos qué habría ocurrido". La ovetense, de 34 años y que vivió en el barrio de La Ería, señaló, no obstante, que "hay otras víctimas de abusos de poder" que "necesitan ser oídas".

Horas antes del archivo de la denuncia, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, había pedido prudencia porque no era una multa, sino un "expediente".