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El jabalí esquiva a la guardería rural

El personal de la Consejería de Desarrollo Rural no ha logrado capturar ningún ejemplar desde que comenzaron las batidas a principios de mes

Un jabalí busca comida en Oviedo ante numerosos vecinos

Un jabalí busca comida en Oviedo ante numerosos vecinos

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Un jabalí busca comida en Oviedo ante numerosos vecinos Marta PÉREZ

La "colonia" de cerca de un centenar de jabalíes que se supone que habita en la ladera Sur del Naranco, zona protegida de caza, lleva más de quince días esquivando a los guardas de la Consejería de Desarrollo Rural. O eso, o alguien los ha espantando y los cerdos salvajes -algunos cruzados con cerdos vietnamitas- se han ido a fozar a montes más seguros. La realidad es que los guardas no han logrado dar caza a ningún jabalí desde que comenzaron las batidas (aguardos, en realidad) el pasado día 6, en respuesta a la petición del Ayuntamiento de Oviedo, con un problema de seguridad en las calles a raíz de las incursiones nocturnas de estos animales en busca de comida.

Los guardas volvieron a salir al monte, por la zona de Las Campas y de Ules, esta semana y la anterior. En una de las ocasiones, tras un aviso de usuarios de la Pista Finlandesa, estuvieron a punto de dar caza a una piara, pero cuando llegaron al lugar ya se habían esfumado. Del resto, no hay ni rastro. Una de las hipótesis que barajan es que alguien -no señalan a nadie- haya metido perros al monte para espantar a los animales, que habrían emigrado.

Mientras, el Principado mostró hace unos días su rotunda negativa la propuesta municipal de esterilizar a las jabalinas del Naranco para controlar así la población en el monte ovetense, al considerarla "inviable". La propuesta partía de concejal de Seguridad en Oviedo, Ricardo Fernández, como alternativa a la caza de ejemplares. Tanto se había complicado la situación en la ciudad, que el Ayuntamiento pidió ayuda al Principado para controlar la "invasión" nocturna de jabalíes. La Consejería puso entonces en marcha las batidas "sin cupo". Estas actuaciones encresparon los ánimos de los cazadores de la zona, quienes reclamaban participar y controlar en los aguardos que se están desarrollando en el monte Naranco "para que no se convirtieran en una masacre".

No fue así y, al menos según indican las fuentes consultadas, ningún jabalí ha caído en la operación. El malestar de los titulares del coto de caza hizo reaccionar al concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Oviedo, Ricardo Fernández, quien pidió por escrito a la titular de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, María Jesús Álvarez, un cambio de planes, al menos a medio plazo.

"No sé si es o no posible o asumible, pero creo que si se realizara el control de la cabaña de jabalíes esterilizando a las hembras de forma pautada y controlada sería factible mantener el número de estos animales en los distintos montes del municipio dentro de los parámetros normales, evitando sus incursiones en la ciudad y que, por lo tanto, puedan resultar peligrosas para los vecinos", escribió entonces Ricardo Fernández. De momento, la Policía Local no está recibiendo más avisos por incursiones nocturnas de jabalíes y la situación parece controlada.

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