De los treinta chiquillos que formaban parte de la última promoción que estudió todos los cursos de la antigua EGB (Educación General Básica) en las escuelas del Fontán nueve acudieron a la cita del reencuentro. Los antiguos compañeros se dieron cita a las puertas del histórico edificio. El encuentro se prolongó con una cena y algunas copas y estuvo repleto de recuerdos, anécdotas, nostalgia y risas.
Rafael Menéndez, uno de los antiguos colegiales que respondieron a la convocatoria, cuenta como, después de que ellos abandonaran el centro, en el año 1986, todo el colegio se trasladó en bloque al centro público Veneranda Manzano, que había sido inaugurado hacía poco tiempo.
"Al cabo de dos o tres años, aproximadamente, el colegio se reabrió para impartir clases para adultos", añade. Y así sigue en el corazón del Antiguo, como un centro de educación para adultos.
Rafael Menéndez evoca cómo en la escuela quedaba el rastro de cuando los niños y las niñas estudiaban separados. "Durante la cena nos partíamos de risa recordando nuestros años en el colegio", comentó. Hasta de los viejos retretes sin inodoro y con un simple agujero en el suelo.
Tuvieron muy presentes a sus últimos profesores de EGB, Pilar Pis Pérez -ya fallecida-, María Teresa Tejedor Fuentes y Eduardo Díaz Rodríguez.
Menéndez, que ahora reside fuera de Asturias como muchos de sus antiguos compañeros de escuela, está preocupado por los planes del Ayuntamiento para las escuelas del Fontán, tras conocer la posibilidad de que se trasladen a ellas las oficinas de recaudación municipal. "El espíritu educativo del edificio fenecerá en breve. ¡Una pena! ¡Qué nostalgia de aquellos buenos años!", se lamenta.
