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Los médicos interinos temen "chanchullos y amiguismos" en las nuevas oposiciones

Las primeras convocatorias de la nueva OPE no incluyen medidas que eviten irregularidades como las de 2011, sostienen los opositores

Participantes en las oposiciones de médicos de 2011. LNE

Los médicos interinos de la región temen que en las oposiciones de facultativos previstas para los próximos meses se repitan los "chanchullos y amiguismos" que se registraron en los procesos selectivos celebrados en 2011, algunos de los cuales llegaron a los tribunales. Uno de ellos, el de especialistas en medicina interna, incluso fue juzgado por el Tribunal Supremo, que anuló parcialmente el proceso y ordenó repetirlo -la ejecución de la sentencia está pendiente- al haberse filtrado preguntas a algunos de los opositores por parte de determinados miembros del tribunal.

Los aspirantes a los concursos-oposición que ayer mismo comenzaron a publicarse en el Boletín Oficial del Principado (BOPA) se muestran desencantados con las bases de la convocatoria. Sostienen que de ellas no se deduce que la Consejería de Sanidad haya adoptado medida preventiva alguna. "Han sacado la convocatoria como si en 2011 no hubiera pasado nada", declararon ayer a LA NUEVA ESPAÑA algunos de los firmantes de un manifiesto difundido el pasado mes de abril por 149 facultativos con contrato temporal. Sostienen que el Servicio de Salud del Principado (Sespa) "no ha hecho ningún caso" a los que habían reclamado a la Administración medidas concretas que garantizasen la limpieza en los procesos selectivos del futuro.

La Consejería de Sanidad publicó ayer en el BOPA las primeras convocatorias de la oferta pública de empleo (OPE) de 2016. Se trata de las cuatro especialidades en las que la sanidad pública asturiana sufre mayor escasez de profesionales, motivo por el cual la Administración sanitaria aspira a estabilizar plantilla cuanto antes. El BOPA ha ofertado 96 plazas de medicina de familia, 28 de anestesiología, 19 de radiodiagnóstico y 17 de pediatría de atención primaria. Una vez resueltas estas oposiciones, la intención de la Consejería es "seguir sacando a concurso el resto de las plazas en grupos de cuatro en cuatro con el objetivo de finalizar el proceso durante el próximo año".

La primera lectura de estas convocatorias iniciales no ha agradado a los médicos interinos. Quizá el cambio más sustantivo que introducen las de anestesia y radiodiagnóstico es que la parte práctica del examen no constará de dos casos, como en 2011, sino de uno. Por lo demás, censuran la existencia en el texto de la convocatoria de un excesivo recurso al "corta y pega" de las bases de hace cinco años. Como anécdota, señalan que, en el apartado del ejercicio práctico, se indica que la prueba "consistirá en la resolución, en el tiempo máximo de una hora, de un supuesto práctico a elegir entre los dos propuestos por el tribunal". Y acto seguido se precisa que "la prueba se calificará de 0 a 50 puntos, obteniéndose su calificación final de la suma de las puntuaciones alcanzadas en cada uno de los supuestos prácticos valorados de 0 a 25 puntos cada uno de ellos".

Mejor el modelo MIR

Entre los interinos, tiene una cierta prevalencia la idea de que, si se quiere reducir al mínimo el riesgo de irregularidades en los procesos selectivos de esta naturaleza, lo más adecuado sería basarlos exclusivamente en un examen tipo test similar al de acceso a las plazas MIR. "Al final se demuestra que es la prueba más objetiva a la que nos sometemos a lo largo de nuestra vida", indicaron los interinos consultados por este periódico. Es en la evaluación de los casos prácticos donde observan más peligro de irregularidades, dado que "hay valoraciones que siempre estarán sometidas a la subjetividad de los miembros del tribunal". En el proceso selectivo de medicina interna de 2011 que anuló el Supremo la filtración que los jueces dan por acreditadas afectó precisamente a los casos prácticos.

Si se analiza con detalle la convocatoria publicada ayer, se detecta una novedad con respecto a la de 2011. En el epígrafe titulado "abstención y recusación", se añade un párrafo que no figuraba entonces: "El presidente deberá solicitar de los miembros del tribunal declaración expresa de no hallarse incursos en las circunstancias previstas en el precitado artículo 28 de la Ley de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común, ni en las demás causas de abstención previstas en esta base".

En el manifiesto de 149 médicos anteriormente citado, los facultativos con contrato interino o eventual -de los que aproximadamente la mitad trabajan en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA)- especificaban que sus reticencias acerca de los futuros procesos selectivos se basaban en el hecho de que "en muchos ámbitos, incluido el nuestro, la línea de separación entre criterios de afinidad política / familiar / de amistad y aquéllos relacionados con el mérito profesional es muy borrosa". Por este motivo, apostillaban, "tenemos el caldo de cultivo ideal para los que quieran sacar provecho". En los procesos selectivos de 2011, además del importante conflicto de medicina interna, también se detectaron irregularidades en los procesos selectivos de medicina intensiva y rehabilitación. En este último fue sancionada una integrante del tribunal.

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