Covadonga Díaz, concejala del PP en el Ayuntamiento de Oviedo, ha mostrado hoy su indignación por las declaraciones realizadas el viernes por el edil Rubén Rosón (Somos) animando a la política conservadora a buscarse "otra carrera profesional" para no tener que "salir a hacer declaraciones que ni ella misma se cree". Rosón se refería así a las acusaciones vertidas poco antes por Díaz contra Somos, partido al que acusa de crear "una red clientelar" entre sus afines a base de adjudicar contratos menores a dedo. De esta forma, y en un comunicado que se reproduce a continuación, la concejala del PP afeó a Rosón su consejo profesional y abundó sobre, lo que a su juicio, sucede con los contratos menores y los podemistas. "El Partido Popular denuncia con datos, que el tripartito está aprovechando los recursos públicos para crear una red clientelar en la que recompensar a sus colectivos afines, y el señor Rosón contesta diciendo que tengo que hacer una carrera y buscarme una profesión al margen de mi labor como concejal. De la red clientelar nada que decir. Del cuarto de millón de euros de incremento del presupuesto en el área de Ana Taboada y su nula rentabilidad para los ovetenses, nada que decir. De los gastos escandalosos en una jornada, o en medio minuto, nada que decir.

Con Grado y Master universitario, y más de doce años cotizados a la Seguridad Social fuera de la política a los 36 años, no me puedo rebajar a discutir cuestiones personales con un profesional de la política desde el instituto. No voy a darle el gusto de desviar el debate sobre lo realmente grave, los más de 250 mil euros públicos dilapidados en recompensas al entorno íntimo y círculo de confianza. No voy a bajar al barro en el que siempre ha desarrollado su labor política al frente de movilizaciones estudiantiles; boicoteando plenos de la Universidad; ocupando edificios ajenos, o recurriendo ahora a la descalificación personal y la mentira para evitar el debate sobre lo importante para todos los ovetenses.

Pasar del cuento al insulto puede ser la salida más fácil cuando se vive en la demagogia y el discurso propio se fundamenta en atacar y descalificar. Pero eso no invalida unos datos que son públicos y que el equipo de gobierno no puede negar. Es el reconocimiento implícito del despilfarro de un cuarto de millón de euros de los ovetenses en contratos menores y facturas a personas afines por trabajos de escasa o nula repercusión en los ovetenses. Por mucho que se intente descalificar o insultar a quién denuncia o al partido que lo denuncia".