Las tres erres son las reglas más conocidas para disminuir la cantidad de basura generada y cuidar en el medio ambiente. Reciclar, reducir y reutilizar. Pero el colegio Santa Teresa de Jesús ha querido ir más allá e introducir una cuarta: repescar. Una suma de las tres anteriores que tiene, además, la función específica de mantener los mares y ríos limpios y el pescado sano. Un proyecto que comenzó en octubre, cuando con motivo de la entrega del Premio Princesa de Asturias de Cooperación a Naciones Unidas, se invitó a los colegios a reflexionar y generar conciencia en torno al reciclaje.

Recogieron el guante y los aproximadamente 700 alumnos de Infantil, Primaria y Secundaria del centro participaron en la creación un pez gigante utilizando bolsas de plástico. Y se colgó en la valla que rodea una de las pistas polideportivas del colegio, a la vista de todos. "Con una sola clase no habría sido posible", destaca Carmen Gómez, directora de Primaria, que al mismo tiempo que resalta que "los niños están encantados" apunta que "las acciones tienen todo el apoyo del equipo directivo". Alrededor del enorme animal de plástico y sus recicladas escamas se han ido realizando acciones.

A lo largo de la semana pasada participaron en la semana europea de prevención de residuos y colocaron en el pasillo tres contenedores. "Cada clase iba acumulando bolsas en un rincón y en el recreo los estudiantes las clasificaban", explica la directora. Las rotas al contenedor de reciclaje, las que están en buen estado al de reutilizar, y las que son más gruesas o de materiales como papel o tela al de reducir. "Pasamos unos cuántos recreos haciendo esto", explica Carmen Gómez. La destreza de Mauro García, estudiante de 2º de Primaria, respalda la afirmación. Pliega una bolsa varias veces con mucho cuidado hasta convertirla en un pequeño triángulo. Luego la deposita en el contenedor de reutilizar. En las aulas, asimismo, han colocado un cubo con distintos envases. Un experimento para que los niños vean con sus propios ojos cómo el papel se degrada mucho antes que el plástico.

Durante el próximo mes unas bolsas se repartirán entre los alumnos para que les den uso en sus casas y otras serán desechadas. Harán algo parecido con el símbolo de la campaña. El pez de plástico será desmontado y sus escamas serán recicladas o se les encontrará un nuevo uso. Así, se pondrá fin a una series de acciones que se completan en el aula con jornadas de concienciación y reflexión que han calado hondo en la comunidad educativa del Santa Teresa de Jesús. Tanto, que además de añadir una nueva erre a las tres fundamentales, darán ejemplo con el propio símbolo de su proyecto.