Los vecinos de Olivares han comenzado a votar el nombre que tendrán sus quince calles, cerca del Alto de Buenavista, al tener que elegir en una lista de 45 opciones. Treinta de ellas se refieren a jugadores históricos del Oviedo y quince a denominaciones tradicionales de la zona. En la votación, que empezó ayer y finalizará el 22 de enero, sólo pueden participar los empadronados en el barrio. La página web del Ayuntamiento (www.oviedo.es) es la plataforma en la que los interesados están depositando su voto, salvo los días 17 y 19 de enero, que podrán hacerlo presencialmente en una urna instalada en el centro social de Olivares. El resultado no se hará público hasta que termine el proceso.

"La gente está emocionada con la votación, pero parece que tira más acercarse al centro social a echar el voto", comentó ayer Lope Calleja, vocal de la asociación de vecinos que aún no había participado en la elección de los nombres de unas vías que hasta la fecha no tienen ninguno y provocan quebraderos de cabeza a los habitantes, a los carteros y a los repartidores. En realidad, una de las calles ya ha sido bautizada por unanimidad popular como avenida de Olivares "porque es la arteria principal del barrio y no merecía gran discusión". Así, los habitantes tienen que marcar catorce casillas para elegir entre opciones como: La Campa, La Torre, La Vallina, El Pradín o Tensi, Emilio y Falín, Armando, Mesa, Vili, Casuco o Echevarría, entre otros.

El único inconveniente técnico lo ha puesto el grupo municipal de Ciudadanos al afirmar que la concejalía de Participación Ciudadana, liderada por Ana Taboada, cometió irregularidades en la modificación de las bases de la votación. En un primer momento, la elección de los nombres iba a estar abierta a todos los ovetenses, pero una resolución municipal cambió el proceso y redujo la votación a los residentes de Olivares. Según Luis Zaragoza, concejal de Ciudadanos, "Somos firmó la modificación de las normas del proceso electivo entes de tener el informe técnico preceptivo". Y da fechas. En concreto, la resolución que cambia las bases es del 4 de enero, mientras que el informe técnico municipal "que debe avalar esa decisión" está creado y firmado un día después, justo cuando iba a empezar la votación. "Creemos que la decisión política sobre quién iba a votar en este proceso ya estaba tomada y que se sustenta en un informe encargado a medida. La consecuencia es que los vecinos están inmersos en un clima de crispación y enfrentamiento. No se pueden modificar los procedimientos el mismo día que comienzan las votaciones", sostiene Zaragoza.

Olivares tiene cerca de 3.000 habitantes. Según sus vecinos, la necesidad de bautizar las vías se hizo patente en época del exalcalde Antonio Masip, cuando Olivares se convirtió en una zona residencial sujeta a un Plan Especial de Reforma Interior (PERI).