Un motorista falleció ayer por la mañana en el cruce entre Las Caldas y Santa Marina de Piedramuelle al salirse de la vía, chocar contra un pivote de seguridad, salir despedido de su vehículo por encima del quitamiedos y acabar tendido en un prado a 40 metros de la carretera y junto a una residencia geriátrica. Al parecer, A. A. M., de unos 50 años, circulaba en dirección a Trubia cuando, por razones que la Guardia Civil está investigando, perdió el control de la moto. Los técnicos de los servicios sanitarios acudieron con una UVI móvil y le intentaron reanimar durante cerca de media hora sin resultado.
Un testigo que socorrió a la víctima minutos después de que acabara en el terraplén, aseguró a este periódico que el hombre "estaba inconsciente, pero con vida". Según su versión, es posible que el motorista se pusiera de pie y caminara unos pasos antes de desplomarse en el prado. "Los guantes estaban tirados a unos metros de él, y esa es una prenda que no se cae sola o por la fuerza de un impacto sino que es necesario quitársela uno mismo", explicó el testigo, trabajador de un almacén de cerámica ubicado frente al terraplén y que prefirió mantenerse en el anonimato.
La Guardia Civil recibió el aviso del accidente hacia las 11.45 horas y hasta el cruce de Las Caldas con Santa Marina de Piedramuelle también se desplazaron los Bomberos de Oviedo. Allí encontraron la motocicleta tirada en mitad de unos de los carriles. Un coche todoterreno la arrolló instantes después de producirse el accidente, cuando el motorista yacía en el terraplén. En el prado todavía son visibles las marcas de las ruedas de la ambulancia y las que dejó la víctima tras desplomarse.
