"La construcción del túnel del Aramo, que permitirá mejorar y garantizar el abastecimiento de agua para el Oviedo del siglo XXI, se está convirtiendo, cinco meses después de su inicio, en unas obras faraónicas, tanto por las dificultades que presenta su avance como por las condiciones en las que trabajan, las 44 personas que perforan el túnel. Debido a estas extremas condiciones laborales, los sindicatos han promovido una huelga indefinida que comenzó el martes de la semana pasada".