Aunque apenas queda un mes y medio para que termine la moratoria concedida por el Ayuntamiento de Oviedo para que los hosteleros se adapten a la nueva normativa de terrazas, pocos han comenzado los trámites. Según fuentes de la concejalía de Urbanismo, de hecho, 50 de los 79 propietarios de negocios que tienen instalaciones tipo B. Una situación que preocupa en el Consistorio, que se dirigió ayer por escrito a los afectados para pedirles que pongan en marcha la regularización. Si el próximo 30 de septiembre los titulares no se han adaptado a los cambios de la normativa vigente, destaca el texto, "la terraza carecerá de autorización para estar instalada y podrá ser requerida para que se retire de la vía pública".

A finales del año pasado, asimismo, el tripartito acordó con los hosteleros retrasar la entrada en vigor de la nueva ordenanza para las estructuras fijas de grandes dimensiones, que deben ser desmontables, accesibles y tener una separación mínima con respecto de los edificios de tres metros. En un principio, debían estar actualizadas el pasado mes de abril, una fecha que se retrasó cinco meses, ya que los negocios solicitaban un mayor margen de maniobra. Su objetivo era conseguir un poco más de tiempo y ampliar el plazo, al menos, hasta que pasasen las fiestas de San Mateo. Pese a la prórroga, el departamento de Licencias apenas ha registrado movimiento por parte de los propietarios de las estructuras. Y con el límite cada vez más cerca, el Ayuntamiento ha decidido enviar un recordatorio a todos los afectados.

El papeleo, destaca el gobierno municipal en la comunicación enviada a los hosteleros, tiene sus propios ritmos y apurar demasiado conlleva riesgos. "Le recordamos la conveniencia de no agotar el plazo señalado, pues la solicitud que formule requiere unos tiempos mínimos de tramitación", reza el documento. "Los lunes, en horario de 9.00 a 14.00 horas, están a su disposición los Servicios Técnicos Municipales para ayudarle en el proceso de regularización de la instalación", finaliza la carta.