Alrededor de medio centenar de vecinos se concentraron ayer en Ventanielles para protestar contra el proyecto que se baraja para el Bulevar de Santullano. El plan para urbanizar la entrada a Oviedo por la autopista no cuenta con el beneplácito "de la gran mayoría de los residentes" en el barrio, que entre otras cosas están muy preocupados por el impacto que podría tener el parking subterráneo de pago previsto para el entorno del Palacio de los Deportes en las calles y edificios cercanos. "Si hacen el aparcamiento se caerán nuestras casas, como ya pasó hace veinte años", asegura Josefa Cumbreras, una de las vecinas que ayer tomó parte en la concentración.

La mujer se refiere a lo ocurrido en el año 1998, cuando las viviendas de la calle Río Orlé, en el entorno del Palacio de los Deportes, fueron desalojadas por la presencia de enormes fisuras en las paredes. Tras un largo proceso judicial en que se apuntaba a la construcción del aparcamiento de La Tenderina como causa del desastre, los tribunales señalaron una alteración del nivel freático de la zona como consecuencia de las numerosas obras realizadas. "Los geólogos expertos están diciendo que el subsuelo de esta zona es todo agua y quieren hacer dos parkings, uno en Ventanielles y otro aquí al lado, junto al centro comercial de Pumarín. No vamos a permitir que caigan los edificios y que ocurra otra desgracia", señala Belén Fernández, la presidenta de la asociación de vecinos "San Pedrín".

Fernández afirma que en el barrio sólo hay "cuatro personas" que estén a favor del proyecto, "los que están en la plataforma Imagina un Bulevar", dice.