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Los cultivos del Paraíso

El dulce aroma del invierno

El alhelí reina en esta época del año en el jardín Las semillas refuerzan la actividad cardiaca, mientras que las flores en infusión calman la jaqueca

Flores de alhelí. Pelayo Fernández

Eran los primeros días de mayo. Apenas hacía dos semanas que había estallado la Guerra Civil. Su padre la mandó con unos parientes que vivían en Francia. No estaba muy lejos de la frontera, pero lo suficiente como para vivir tranquila. Allí crecería y no volvería a España hasta pasados quince años.

Al principio todo era muy extraño en una casa con prácticamente unos desconocidos, lejos de sus padres, y sin entender ni una sola palabra de lo que se hablaba. Se pasaba el día imaginando que regresaba a su casa.

Rápidamente, comenzó a comprender el francés y aunque en casa hablaban algo en castellano no tardó en olvidarlo. Era muy aplicada y destacaba entre todas las niñas de su clase. Entonces ya tenía claro que quería estudiar enfermería y así fue, llegando a ser la mejor de su promoción. Hoy, con casi noventa años, recuerda con nostalgia aquellos años mientras pasa los días atendiendo un pequeño jardín lleno de alhelíes.

La planta es originaria de la cuenca mediterránea y de Asia central. Su nombre científico es Matthiola incana, pero es más conocido como alelí o alhelí de invierno. Posee un aroma característico capaz de perfumar todo el jardín, donde es indispensable en esta época del año. Tolera las bajas temperaturas y puede cultivarse en una maceta o bien directamente en el terreno, al que se adapta, independientemente de su textura o Ph, aunque lo prefiere calcáreo y pedregoso. Lo más importante es que sea permeable y que el exceso de agua desaparezca rápido, ya que tolera muy bien la falta de humedad, pero no el exceso. La exposición ha de ser soleada o semisombra. A pesar de darse en invierno es una planta que requiere de un abonado regular, cada dos semanas. De esta manera se evitará la aparición de hojas amarillas.

Las flores, de una amplia gama de colores en tonos rosas, malvas, rojos o incluso amarillos, pueden ser simples o dobles, las cuales a medida que se van pasando se pueden eliminar de manera manual (esa es la poda más apropiada), para estimular la aparición de otras.

Para conseguir un jardín colorido y oloroso en invierno puede hacerse un buen semillero en verano. Para ello puede utilizarse un sustrato especial para semilleros o bien elaborar uno casero e igual de efectivo a la hora de germinar semillas. Basta con mezclar a partes iguales arena y turba o utilizar los jiffys vestidos (turba pensada envuelta en tela).

En ambos casos, si se mantiene un poco la humedad del sustrato, será mucho mejor para la germinación. En dos semanas comenzaremos a ver los primeros resultados. En otras épocas del año es viable si se hace en un lugar donde se pueda controlar que la temperatura gire en torno a unos dieciocho grados. Suele ser el método de reproducción más rápido y efectivo, aunque si se quiere se puede multiplicar con los tallos más "leñosos" y que no sean de ese año. No es una planta especialmente complicada a la hora de cultivar, salvo que es algo sensible a hongos, el oidio y la botritys. El primero se caracteriza por un polvillo blanquecino en el haz de la hoja. Un tratamiento con cobre suele ser la solución. El segundo es algo más complicado de eliminar y puede reconocerse por la aparición de un moho gris. Al pertenecer a la familia de las crucíferas se pueden ver afectadas por otro hongo que ataca las raíces, forma tumores alargados, y amarillea las hojas hasta que se pudren. En esta circunstancia sí es importante eliminar toda la tierra y desinfectar para evitar que vuelva a suceder. Los pulgones y otros insectos pueden tratarse con un macerado de ortigas o ajo para mantenerlos alegados. Podemos aprovecharnos de sus usos medicinales a pesar de ser una planta un tanto desconocida en este asunto. Las semillas son buenas para el corazón, pues poseen un aceite que refuerza la actividad cardiaca, pero cuidado, si nos pasamos puede ser tóxico.

Las flores en infusión ayudan a calmar los dolores de cabeza. También tiene propiedades diuréticas y depurativas.

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