"No vamos a descansar. Si hay posibilidad de que los responsables políticos paguen por este latrocinio, la exploraremos hasta las últimas consecuencias". Esta fue la advertencia que lanzó ayer el edil de Economía, Rubén Rosón, a los exalcaldes del PP Gabino de Lorenzo y Agustín Iglesias Caunedo, a los que culpabilizó directamente del "pufo" de los "casi 19 millones" que el Ayuntamiento va a tener que pagar por el Calatrava. Es más, el concejal de Somos reclamó la dimisión de Caunedo, actual portavoz municipal de los populares, al que emplazó a "pedir perdón" a los ciudadanos.
Rosón descartó, por "repetitiva", la creación de una segunda comisión de investigación sobre el caso, pero dejó abierta la puerta a la apertura de un expediente patrimonial como el que está en marcha para determinar si De Lorenzo y el que fue su equipo municipal pueden considerarse responsables de la ruinosa operación del palacete "Villa Magdalena".
Respecto al impacto del caso del Calatrava en el presupuesto y, más en concreto, en el capítulo de inversiones, Rosón se mostró confiado en que se puedan salvar 30 de los 32 millones de euros consignados inicialmente gracias, en buena parte, a los remanentes de tesorería. Según sus cálculos, supondrán unos diez millones adicionales.
Para el edil de Economía, De Lorenzo y Caunedo "han sido los peores alcaldes que ha tenido Oviedo en toda su historia".
