El hombre de origen saharaui acusado intentar matar hace dos años a un menor, nacido en el año 2000, con una navaja de 17,5 centímetros, en una pelea en el parque de San Pedro de Los Arcos, aceptó ayer una condena de un año y cuatro meses de cárcel. El varón aceptó la propuesta del fiscal de rebajar la pena inicial de tres años y nueve meses de prisión, teniendo en cuenta como eximente la alteración mental del investigado, que padece esquizofrenia, y reconoció los hechos ante el juez.

El acuerdo entre el fiscal y la defensa evitó la celebración de la vista prevista en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial. El pacto incluyó mantener la petición de seis años de orden de alejamiento del autor sobre su víctima, así como la obligación de indemnizarle con 6.000 euros, como había solicitado inicialmente el ministerio fiscal.

El procesado, que cuenta con otras causas delictivas pendientes, deberá esperar todavía para saber si finalmente ingresa en prisión. "Dependerá de la ejecutoria", indicó la abogada Gemma Arbesú sobre la posibilidad de que el juez decida finalmente su encarcelamiento.