Susana Pérez-Alonso, vecina de un edificio de la calle Uría, ha redactado ya una denuncia para presentar en el Juzgado contra un vecino que derribó el tiro de la chimenea y que provocó que desde hace ocho años no se pueda utilizar este elemento en dieciséis pisos del edificio.

La denunciante explica que "el vecino del quinto decidió derribar el tiro de la chimenea para colocar una televisión de plasma, lo que provocó que el resto de chimeneas de esa parte del edificio quedasen inutilizadas". Susana Pérez-Alonso lo puso entonces en conocimiento de la comunidad de propietarios que por unanimidad instó al hombre a reparar el daño. Nunca se hizo de manera correcta, según la denunciante, que decidió entonces acudir al Ayuntamiento. "He hablado con todas las corporaciones municipales desde 2010 hasta ahora y no he encontrado ninguna respuesta, así que llevo ocho años sin chimenea", dice Pérez-Alonso. El expediente municipal se paralizó y se volvió a abrir en varias ocasiones.

Tras años de quejas y escritos al Ayuntamiento, la mujer ha decidido presentar una demanda en el Juzgado ante lo que sospecha "es una trama de corrupción". "Lo que quiero es que la Fiscalía intervenga de manera inmediata", dice rotunda y critica la "impunidad" con la que ha actuado el hombre.