“Begoña fue una mujer excepcional en su entrega y lucha por los más desfavorecidos. Soy testigo directo de su bondad y de su amor por los demás”. El párroco de San Juan el Real, Javier Suárez, describió así en una abarrotada iglesia el carácter de la exconcejala socialista ovetense, fallecida el jueves. Sus palabras calaron hondo en los presentes. Familia, amigos y compañeros de distintas militancias políticas se emocionaron durante una cálida y elegante ceremonia de despedida, con música de violín.

El exalcalde Antonio Masip, que lideró una de las corporaciones en las que ella trabajó como edil de Políticas Sociales, no pudo contener las lágrimas. A pocos metros de él estaban los socialistas Wenceslao López, actual regidor, y las concejalas Ana Rivas y Marisa Ponga. También el histórico del PP asturiano Isidro Fernández Rozada acudió para despedir a una persona “honesta, honrada, generosa y que deja un vacío tremendo”. En la misma línea se pronunció Jaime Reinares. El exedil popular compartió con ella dos legislaturas en el Ayuntamiento, aunque en bandos diferentes (1987 a 1991 y del 91 al 95). “Fue una excelente política y extraordinaria persona”, dijo.