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El tripartito ovetense defiende el contrato de los comedores: "Mejorará el servicio"

La concejala de Educación niega que el concurso esté dirigido y replica a las firmas de catering que las exigencias de solvencia están "ajustadas"

El comedor escolar del colegio de Villafría. MIKI LÓPEZ

El Ayuntamiento de Oviedo ha endurecido el pliego de condiciones del contrato para la concesión del servicio de comedores escolares del municipio "para mejorar el servicio". Esa es la respuesta de la concejala de Educación y Salud Pública, Mercedes González (Somos), a las críticas recibidas por parte de la Asociación de Caterings de Asturias, un colectivo que acusa al Consistorio de haber planteado un concurso que deja sin opciones a las pequeñas y medianas empresas del sector y que presenta importantes carencias a la hora de exigir una cierta calidad en la preparación de los menús.

Al concurso se han presentado una docena de aspirantes, pero los empresarios sospechan que el proceso podría estar dirigido. "El servicio de comedores de Oviedo ha mejorado y va a mejorar aún más con la nueva licitación. Con nuestra llegada lo primero que hicimos fue mejorar sus menús, introduciendo más frutas y verduras, y prohibiendo determinados alimentos como la panga. Ahora, con esta nueva licitación pretendemos dar un paso más: elevamos el precio mínimo por menú porque no podemos permitir una comida de baja calidad para nuestros niños", dice Mercedes González.

La Asociación de Caterings de Asturias también criticó a través de este diario que el Ayuntamiento de Oviedo exija una solvencia económica "desproporcionada" a quienes muestren interés en hacerse con la concesión, ya que el Consistorio pide un volumen anual de negocios igual o superior a los 5.277.000 euros en alguno de los últimos tres años para otorgar el servicio. "No podemos permitir que las trabajadoras que atienden a nuestros niños estén con malas condiciones o tengan importantes retrasos en el cobro de las nóminas, como sucede en la actualidad con la empresa adjudicataria. Y es que la acreditación de una mínima solvencia económica existe, entre otras cosas, para intentar asegurar que los trabajadores de las contratas cobren sus nóminas", espeta Mercedes González. "Además, la elevación del precio mínimo por menú asegura que no existan bajas temerarias y que la empresa adjudicataria pueda mantener la calidad del servicio sin problemas", añade la concejala.

Mercedes González también habló sobre el acceso de las pequeñas y medianas empresas al contrato. "Se prevé un porcentaje de subcontratación de hasta el 50 por ciento, que permite que las pequeñas empresas y los empresarios de proximidad puedan acceder a la prestación de este servicio al permitírseles cooperar con otras estructuras empresariales", señaló la edil de Educación.

Solvencia

La concejala de Somos añade que la solvencia económica que se exige en el concurso "se ha intentado ajustar lo máximo posible para asegurar la máxima participación de empresas a este concurso, pero siempre garantizando que se trate de compañías que sean capaces de prestar un servicio tan sensible en condiciones óptimas, tanto desde el punto de vista técnico como del de la solvencia económica".

Mercedes González añade ante las críticas: "Las empresas adjudicatarias tienen que cumplir con sus trabajadores y trabajadoras, pagándoles a tiempo y asegurando sus condiciones laborales y después cumplir puntualmente con el resto de sus compromisos contractuales".

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