"Para mí ha sido el partido más flojo de la temporada. Éste no es el nivel que tiene el Oviedo, estuvo falto de ideas y de juego. Esperemos que sea, efectivamente el peor del año", sentenció ayer Dani Amieva, que junto a Paco Galán, ambos exjugadores del conjunto azul, siguieron ayer el partido entre el Granada y el Real Oviedo en la redacción de LA NUEVA ESPAÑA. Eso sí, mantienen intactas las esperanzas que han puesto en el equipo de Anquela. "La Segunda División es muy larga y es un equipo muy renovado y con entrenador nuevo. Hay que darles tiempo, porque lo hay y hay equipo para estar mejor en la tabla", señaló Galán.
Ya lo decía antes de comenzar el partido Dani Amieva: "En Segunda es difícil adelantarse en el marcador, pero más difícil es remontar". Y a los cuatro minutos, el primer jarro de agua fría, el tanto en propia puerta del Oviedo que adelantaba al Granada. "Este gol llega muy pronto", lamentó Paco Galán, para añadir: "Estos tantos tempraneros son lo peor que le puede pasar un entrenador, te destrozan todo el trabajo que habías planteado". Amieva, estuvo de acuerdo, pero puso un punto de esperanza: "Los equipos de Oltra -entrenador del Granada- no se echan atrás aunque vayan por delante".
Fue mediada la primera parte cuando los dos exjugadores empezaban a ver que el partido no era el habitual del Oviedo. "Igual están muy estirados", comentó Galán; "lanzan el balón adelante, tienen que jugarlo más", añadió el asturiano. Mientas pasaban los minutos, los dos iban coincidiendo una y otra vez en su teoría. "El Oviedo quiere robar y salir rápido, pero cuando la presión no funciona arriba, hay que tener más paciencia", explicó Dani Amieva.
La conclusión que tenían al descanso los dos exoviedistas la mantuvieron también durante toda la segunda mitad. "El partido está igualado. Quitando el gol -luego serían los goles- no ha habido peligro y no ves un dominio claro por ninguna de las partes", señalaba Paco Galán, a lo que Amieva contestaba: "Pero el Granada está mejor posicionado, no está sufriendo nada".
Mientras se reanudaba el partido, Amieva hizo sus cábalas: "El Oviedo tiene algo bueno. Anquela sabe corregir y transmitírselo a los jugadores. Verás como en la segunda mitad junta las líneas y yo creo que va a optar por dos delanteros". No se confundió en lo segundo, pero para lo primero no hubo tiempo. En el minuto dos de la reanudación llegó el segundo de los granadinos. "A ver si marcamos antes del 70", repetían los dos. Con todo, no perdieron la esperanza hasta el final, igual que los jugadores. Y la misma sensación: "Por lo que se vio sería un empate sin goles", dijo Galán; "Pero ellos estuvieron más colocados", contestó Amieva.
El partido fue triste, como triste fue el día para los oviedistas con la muerte de Toni Cuervo. Galán lo recuerda bien, porque lo tuvo de entrenador en la temporada 76-77. "Quiero mandar todo mi ánimo y mi cariño a la familia. Era una gran persona", afirmó su expupilo.
