César Barta, licenciado en Física y miembro del Centro Español de Sindonología (CES), afirmó rotundamente que existen más de un 80 por ciento de coincidencias entre el Santo Sudario de Oviedo y la Santa Síndone de Turín de pertenecer a Jesucristo.
Barta realizó esta afirmación en su conferencia 'La Sábana Santa de Turín y el Santo Sudario de Oviedo. Estudios comparativos', dentro del Curso de Verano de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) que se celebra en Carmona 'Aportaciones cientificas al estudio de la Sábana Santa de Turín y del Santo Sudario de Oviedo en el Siglo XXI".
El físico, que trabaja como subdirector técnico del Control de Operaciones de Iberespacio (encargada de analizar los vuelos del cohete europeo Ariane), dijo que, aún siguiendo caminos diferentes, ---puesto que la Síndone viajó desde Jerusalén a Francia y recaló por último en Turín; y el Santo sudario llegó a Oviedo por el sur peninsular--, en las dos "coinciden las hipótesis y análisis que a ambas se les han practicado de ser de la misma persona".
En cuanto a las coincidencias entre el Santo Sudario y la Sábana Santa dijo como preludio que "no se pueden comparar los rostros, sino los restos de sangre que hay en ellos". Así, las investigaciones realizadas por él mismo y el CES afirman que "hay muchas similitudes y simetrías, sobre todo, entre las manchas de sangre de la zona de la nuca y del pelo".
No obstante, descartó cualquier teoría que afirmaba que ambas reliquias fuesen pinturas "ya que no hay pigmentos que así lo certifiquen, y aunque algunas personas y científicos siguen sin creerlo, los restos se han analizado dando como resultado que las manchas pertenencen al mismo grupo sanguíneo: AB".
Para Barta, la tradición de realizar copias pintadas de la Sábana Santa empezaron a ser muy comunes a partir del siglo XV cuando el lino descansaba en Chambery, propiedad de los Saboya, realizándose estas copias para regalos.
Por último, dijo que tras tantas comparativas y horas de estudio, ha llegado a la conclusión a que las dos piezas "pertenecen a una misma persona: un varón con pelo largo, barba y bigote que fue flagelado, coronado de espinas y que fue crucificado", concluyendo que es extremadamente improbable que todas las coincidencias existentes entre el Santo Sudario de Oviedo y la Sábana Santa de Turín "sean producto del azar, sino que es probable que la tradición tenga razón al considerarlas de la misma persona: Jesucristo".
EUROPA PRESS
