Oviedo, E. G.

Las once comunidades que aprueban el examen global -la media de las cuatro áreas de conocimiento- no llegan al 40% del total del alumnado en España. Las autonomías con menor número de alumnos (La Rioja, Cantabria, Asturias, Navarra, Murcia...) superan la prueba con holgura.

El 46% de los alumnos vive y estudia en Andalucía, Cataluña y Comunidad Valenciana, tres de las que no pasan el corte.

Pero una cosa son los resultados y otra los presupuestos. El País Vasco tiene el mayor presupuesto por alumno de España y sin embargo ocupa el decimocuarto puesto. La Rioja tiene el noveno presupuesto de gasto por alumno, y ocupa el primer lugar. Murcia tiene el gasto más bajo, pero sus resultados no son malos (502 puntos y décimo puesto). Y Baleares, con el octavo mejor presupuesto por escolar, es penúltimo en el ranking global de competencias.

La prueba demuestra que las comunidades que arrojan buenas notas en una competencia, la tienen en todas las demás. Y viceversa. En este orden de cosas, las puntuaciones dividen el mapa autonómico de España en tres grandes grupos -como si de un aula se tratara.

Un primer grupo de siete autonomías (La Rioja, Asturias, Castilla y León, Aragón, Madrid, Navarra y Cantabria), de sobresaliente y notable. Un segundo grupo de aprobados, con seis autonomías: Castilla-La Mancha, Galicia, Murcia, Extremadura, Cataluña y Andalucía. Y el grupo de los suspensos en el que se incluyen el País Vasco, Canarias, Baleares y la Comunidad Valencia que, junto a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, logra por méritos propios el «muy deficiente».