El Coro de la Fundación Príncipe de Asturias demostró ayer en el Festival de Música de Belém, el más importante de los que se celebran en Portugal, su buen momento vocal con la interpretación de un programa exigente de Brahms, Anton Bruckner y Schubert, en esta ultima parte acompañados al piano por Oscar Camacho, dirigidos por José Esteban García Miranda.

El festival portugués, «Días de música en Belém» organiza en apenas tres días casi setenta conciertos, repartidos en siete salas del moderno centro cultural de la localidad, con un auditorio de acústica perfecta. El Coro de la Fundación ofreció sus dos conciertos en la sala grande. En el de la mañana, a las doce del mediodía, prácticamente llenó el amplísimo patio de butacas, con un publico mayoritariamente femenino. El de la noche estaba programado para las 22.00 horas.

García Miranda, director del Coro desde 1989, se declaraba muy satisfecho al finalizar el concierto matinal. «Se trataba de un repertorio de gran exigencia desde el punto de vista técnico y coral, son obras de coros profesionales y creo que nos ha salido muy bien», señalaba a LA NUEVA ESPAÑA.

La formación interpretó en el programa de la mañana «Fest-und gedenksprüche, op. 109», de Brahms; el «Ave, Maria» y «Virga Jesse», de Bruckner, esta última por primera vez, y cuatro piezas de Schubert: «Die nacht, op. 17 n.º 4»; «Des tages weihe, op. 28»; «An die sonne, d 439» y «Gott im ungewitter, op. 112 n.º 1». El Coro estuvo acompañado por la directora de la Fundación Príncipe, Teresa Sanjurjo, y por su secretario general, Juan Luis Iglesias Prada, así como otros directivos de la institución. Ambos se mostraron muy contentos al final del primer concierto. «Es la primera vez que el coro actúa en Portugal y, a la vez, es una magnífica oportunidad de estrechar vínculos con la sociedad portuguesa, muy vinculada a la Fundación ya que tenemos muchos premiados, patronos y miembros de jurados portugueses», indicó Sanjurjo.

El Festival de Belém ha titulado su ciclo de este año «Las pasiones del alma», en referencia al tratado del mismo título que Descartes escribió en 1649. Descartes afirmaba que hay seis pasiones simples y primitivas: la alegría, la tristeza, la admiración, el amor, el odio y el deseo, y el resto deriva de ellas. En esta edición, el festival propone un viaje musical a través de seis itinerarios diferentes: «La diversidad», «Viajes en el tiempo», «Fuera de lo común», «Espíritu libre», «Romántico» y «Sortilegios». El primer concierto del coro formó parte de «La diversidad» y el que tenía previsto interpretar por la noche, con repertorio básicamente español y portugués, al de «Sortilegios de la voz».

Belém inauguró el ciclo el pasado viernes con un concierto del Coro y Orquesta Retrospect Ensemble, dirigidos por Matthew Halls y con las voces de Gilliam Keith y Katherine Manley (sopranos), James Gilchrist (tenor) y Peter Harvey (bajo), que interpretaron un programa de Haendel. Lo cerrará hoy, 25 de abril, la fiesta nacional de Portugal, con el Coro Sinfónico «Lisboa Cantat», dirigido por Jorge Alves, y la Orquesta Sinfónica Metropolitana, dirigida por Cesário Costa, que ofrecerán la Sinfonía n.º 9 de Beethoven. El Coro de la Fundación, que regresa hoy a Asturias, abordará en las próximas semanas un nuevo reto. El 24 de mayo actuará en Santander, con la Filarmonia Orquesta de Oviedo, ambos dirigidos por Heider, e interpretarán «Carmina Burana». «Nuestro objetivo siempre es continuar mejorando y en ese camino estamos», señala José Esteban García Miranda.