Ellas viven más y peor

Las mujeres asturianas son más longevas que los hombres: como promedio viven siete años y medio más. En 2008, su esperanza de vida era de 84,6 años, frente a los 77,1 años de los varones, pero en esos últimos años de vida su salud se resiente notablemente; de hecho, una mujer puede esperar vivir en plenitud física y psíquica 65,8 años, y en ese aspecto ya no hay tantas diferencias con los varones, que viven sanos una media de 64,1 años.

Éstos son algunos de los datos recopilados en el «Análisis de la mortalidad en Asturias» elaborado por la Consejería de Salud del Principado. La conclusión es que las mujeres afrontan el último tramo de su vida en peor estado de salud y han de sobreponerse a las enfermedades durante 18,8 años. Para los varones, el mal trago es más corto: dura 13 años.

De cualquier modo, las tasas de mortalidad en Asturias están por encima de la media nacional tanto para ellos como para ellas. En Asturias, en 2008 fallecieron 12.718 personas -6.394 varones y 6.324 mujeres-, 72 más que en 2007. La mortalidad entre los varones asturianos está siete puntos por encima de la media nacional, y entre las mujeres también es superior: un 1,1 por ciento. En términos globales, la tasa de mortalidad en el Principado en aquel año fue de 11,8 personas por cada mil habitantes.

No hay diferencia respecto al resto de España en lo que se refiere a las causas de mortalidad. El cáncer resulta la enfermedad más letal entre los varones y causa el 34,5 por ciento de las defunciones; el de pulmón, concretamente, fue la causa más frecuente de fallecimiento entre los varones, responsable de casi el 10 por ciento de las muertes. Siguen las muertes por enfermedades circulatorias (28,4%) y del sistema respiratorio (12,8%).

A la vista de las estadísticas, las mujeres deberían temer más las enfermedades circulatorias, que causan el 38,5% de las defunciones entre la población femenina asturiana; específicamente, las cerebrovasculares causaron el mayor porcentaje de muertes: un 9,2 por ciento. A las enfermedades circulatorias las siguen los tumores malignos (22,1%) y las enfermedades respiratorias (8,5%).

En 2008, las muertes por accidentes de tráfico disminuyeron nada menos que un 32 por ciento. Hubo 22 fallecidos en la carretera y junto a los suicidios (15) y las drogas (14) fue una de las primeras causas de muerte entre los varones de 15 a 39 años. Asimismo, llama la atención la reducción de la mortalidad infantil, con 32 menores de un año fallecidos en 2008. Es la tasa más baja desde el año 2000.