Millones de personas en España, muchos de ellos inmigrantes latinoamericanos, aguardan con ilusión la celebración esta mañana, del sorteo de la lotería de Navidad, en un año marcado por la grave crisis económica que sufre el país.

El sorteo extraordinario de Navidad de la lotería española, el más popular del año, repartirá más de 2.320 millones de euros (unos 3.000 millones de dólares) entre 1.787 diferentes premios, aunque casi todos tienen depositadas sus esperanzas en el ansiado "Gordo".

El "Gordo", primer premio del sorteo, está dotado con tres millones de euros (unos cuatro millones de dólares), lo que supone que el portador de un décimo agraciado se embolsará 300.000 euros (unos 400.000 dólares).

Todo está listo en el Palacio de Congresos de Madrid, donde este año se celebra el sorteo por primera vez, para que comiencen a girar los bombos de la suerte, uno con los 85.000 números que se sortean y otro con los 1.787 premios que se van a repartir.

De "cantar" los números premiados se encargarán, como es tradicional, los alumnos del Colegio de San Ildefonso de Madrid, mientras todo el país sigue atento la retransmisión del sorteo por la radio y la televisión.

Más de la mitad de los 36 alumnos elegidos este año para repartir la suerte son inmigrantes, siendo los ecuatorianos (10 niños) y los bolivianos (5) los más numerosos, aunque también hay un argentino, un dominicano y otro de Venezuela, todos con el mismo deseo de hacerlo bien y no fallar.

De los elegidos, dos terceras partes son niñas y el resto niños, explicó a Efe Pedro Vázquez, subdirector del centro, fundado por el rey Carlos V en el siglo XVI y una de las instituciones dedicadas a la infancia más antiguas de España.

De lunes a jueves y durante los dos meses previos al sorteo del 22 de diciembre, que marca el comienzo de las fiestas de Navidad en España, Vázquez trabaja con los niños, les enseña a modular su voz, a "cantar" los números, a moverse por el escenario y a coger la bola con decisión.

Eduardo Escobar, de 11 años, que este año vuelve a poner voz al sorteo, confesó a Efe que "sólo" se pondrá nervioso si se le cae alguna de las bolas con los números agraciados o si canta el premio "Gordo".

Aunque el sorteo de Navidad es el más arraigado en España, y en él los ciudadanos gastan unos 3.000 millones de euros (unos 4.000 millones de dólares) -aproximadamente el 30% de la facturación anual de Loterías y Apuestas del Estado-, no es el que más millonarios hace, aunque sí el que más premios reparte.

Jugar y compartir lotería navideña forma parte de la tradición y es costumbre entre los españoles regalar participaciones y probar suerte cuando se viaja a otra ciudad, lo que explica que los premios estén siempre tan repartidos.

Aunque si a los españoles se les pregunta por sus supersticiones, manías o preferencias a la hora de escoger un número, sólo un 10,7% admite algún tipo de ritual y el 90% no cree que existan números especiales para atraer la suerte.

No obstante, el 11.710, cuyos dígitos componen la fecha en que la selección española de fútbol se hizo con la Copa del Mundo en Sudáfrica, se agotó en apenas unas horas.

El tradicional sorteo llega este año en plena revolución, tras el anuncio del Gobierno español de que privatizará un 30% de la sociedad pública de Loterías como una de sus medidas para reducir el déficit público generado por la crisis económica.