Tampa (Florida), Efe

Un juez de Estados Unidos ordenó ayer formalmente a Odyssey que proceda a la entrega a España del tesoro de unas 595.000 monedas de oro y plata que rescató del pecio de «Nuestra Señora de las Mercedes» hace cinco años, y por el que desde entonces ha estado luchando sin éxito en los tribunales. La ejecución de la sentencia ha venido demorándose por culpa de los sucesivos recursos que la empresa cazatesoros ha interpuesto ante distintas instancias judiciales. España ha pedido poder acceder al tesoro el próximo martes

Odyssey pide ahora a España más de cuatrocientos mil dólares en concepto de custodia del tesoro durante todos estos años. Un tesoro valorado en más de 500 millones de dólares (unos 380 millones de euros) y que debería estar en manos de sus legítimos dueños en un plazo de diez días.

España considera que es Odyssey quien debe pagar los gastos de custodia, pues fue la empresa la que, por su cuenta y riesgo, extrajo del fondo del mar el mayor tesoro jamás encontrado en las profundidades, y decidió traerlo en secreto a Estados Unidos. Por contra, Odyssey considera que es el Estado español el que corra con los gastos.

El juez exigirá a Numismatic Guranty Corporation (NGC), la empresa a la que Odyssey encargó guardar y conservar las monedas, que desvele los componentes químicos en los que está conservando las 17 toneladas de monedas de oro y plata. La compañía se niega porque dice que es un secreto comercial.