Oviedo

Las II Jornadas sobre amor y ciencia que se desarrollan en Teruel rindieron ayer homenaje al científico asturiano y Nobel de Medicina Severo Ochoa y a su esposa, Carmen Cobián. Las jornadas son un encuentro de divulgación científica en la tradición de Teruel como ciudad del amor, y coinciden con las Bodas de Isabel de Segura (fiestas medievales en honor de los Amantes de Teruel).

El homenaje a Severo Ochoa estuvo protagonizado por Santiago Grisolía, que ofreció la conferencia titulada «Severo Ochoa y Carmen García Cobián: una vida de amor y ciencia». Grisolía, quien a sus 89 años preside el Consejo Valenciano de Cultura, cuenta, entre los galardones recibidos a lo largo de su trayectoria, con el premio «Príncipe de Asturias» de Investigación Científica y Técnica, que obtuvo en 1990.