Asturias es la comunidad autónoma con mayor tasa de plazas desiertas en la última convocatoria del examen MIR. Un total de 17 de las 48 plazas ofertadas en la región para formarse como médico de familia han quedado sin ocupar (un 35,4 por ciento). En el conjunto de España han sido 108 de un total de 1.682 (6,4 por ciento). En el resto de las especialidades, todas las plazas han sido cubiertas, tanto en el Principado como en el resto del país.
La existencia de plazas desiertas resulta difícil de comprender si se tiene en cuenta que al examen MIR del pasado 1 de febrero se presentaron 10.211 licenciados en Medicina que aspiraban a 6.149 plazas de médicos internos residentes ofertadas por el Ministerio de Sanidad en los hospitales y centros de salud de todo el país.
Fuentes de la Consejería de Sanidad eludieron ayer pronunciarse acerca de las posibles causas de esta situación con el argumento de que aún no tienen procesados los datos. El procedimiento de elección de plazas concluyó el pasado martes. Sí se ha pronunciado, en cambio, la comisión nacional de la especialidad de medicina familiar y comunitaria. Su presidenta, Verónica Casado, sostiene que ha sido determinante la decisión del Ministerio de recortar (del 8 al 4 por ciento del total) el cupo de plazas reservadas para médicos extracomunitarios -principalmente latinoamericanos- y de aumentar la nota de corte (del 30 al 35 por ciento de la nota media de los 10 mejores exámenes).
Las 17 plazas desiertas en Asturias se distribuyen por áreas sanitarias del siguiente modo: ocho en la que tiene como cabecera Langreo, cuatro en la de Arriondas, tres en la de Jarrio y dos en la de Cangas del Narcea.
Las claves
De las 48 plazas para formarse como médico de familia ofertadas en Asturias, 17 han quedado desiertas.
Las plazas sin cubrir corresponden a las áreas sanitarias de Langreo (8), Arriondas (4), Jarrio (3) y Cangas del Narcea (2).
