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Una avería revela que el Arqueológico estuvo tres meses sin mantenimiento

El museo sufrió un fallo en un transformador en la medianoche del pasado domingo que lo dejó sin luz y ha tenido que cerrarse al público

Puerta de acceso al Museo Arqueológico de Asturias, en Oviedo, en la que puede leerse "Cerrado por avería". LUISMA MURIAS

A medianoche del pasado domingo, el vigilante del Museo Arqueológico de Asturias, en Oviedo, escuchó tres explosiones en la zona en la que se ubican tres transformadores, próxima al muro que separa el edificio del cementerio de peregrinos de la Catedral y de donde parecía salir humo. Siguiendo el protocolo, llamó a la Policía y a los Bomberos. Éstos comprobaron que el problema era en uno de ellos y de carácter eléctrico. La siguiente visita fue la de los técnicos de EDP Energía (Hidrocantábrico). Su diagnóstico fue que la avería debía resolverla la empresa encargada del mantenimiento. Según pudo saber LA NUEVA ESPAÑA, el museo llevaba desde el pasado mes de diciembre sin mantenimiento. La consecuencia es que la institución cultural lleva tres días sin luz, desde ayer está cerrada al público -los lunes y martes no hay visitas- y ha tenido que suspender las actividades previstas.

Fuentes de la Consejería de Cultura admitieron ayer que el contrato con la empresa de mantenimiento se retrasó tres meses debido a que la adjudicación es plurianual, pero señalan que en este momento ya está operativo, aunque no pudieron precisar la fecha exacta de la entrada en vigor. Las mismas fuentes señalan que el origen de la avería estuvo en que "se quemó parte del transformador de alta tensión a baja tensión", dejando sin fluido eléctrico "toda la instalación y no operativos los espacios expositivos". Se está procediendo de urgencia a resolver la avería, añadieron. "Lo previsible es que tarde unos dos días".

El transformador averiado no puede tener más de cinco o seis años, ya que el Arqueológico reabrió sus puertas en marzo de 2011, tras más de siete años cerrado por obras de ampliación y montaje. Su colección está formada por algo más de 14.000 unidades de registro y en las salas se muestran unas 2.500 piezas, desde la Prehistoria hasta el final de la Edad Media.

Se da la circunstancia de que el incidente se produce en un momento en el que el director de la institución, Ignacio Alonso, se encuentra de baja tras una intervención quirúrgica, y se han producido bajas e incorporaciones de arqueólogos. Desde el pasado día 1 de abril forman parte de la plantilla de la institución los arqueólogos Ángel Villa y César García de Castro, y ha causado baja, por traslado a otro puesto, Jorge Camino.

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